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Las reiteradas e inusuales críticas del presidente electo Nicanor Duarte Frutos, quien acusó -sin dar nombres- a algunos altos exponentes de la Iglesia Católica de ser "fariseos", "hipócritas" y "manipuladores de la fe", han sido tomadas dentro del seno de la Iglesia como así también en ciertos sectores de la sociedad como una postura que riñe con la posibilidad de mejorar el Paraguay, que está sumido en la pobreza, traducida en desocupación galopante, carencia de salud pública y educación deplorable, entre otros males crónicos.
Todo empezó después del año 1500 con Martín Lutero, ex sacerdote católico, quien abandonó su ministerio para contraer matrimonio civil con una monja. Se apartó de la Iglesia Católica negando gran parte de las verdades de la fe y empezó una lucha muy violenta contra la Iglesia Católica.
En la misma época el rey Enrique VII, de Inglaterra, se separó de la Iglesia Católica porque el Papa se opuso a su propósito de contraer nuevo matrimonio separándose de su esposa legítima. Muy pronto obligó a todos los ingleses a que abrazaran la nueva religión, el Anglicanismo, desatándose al mismo tiempo una cruel persecución contra todos los católicos.
Con el correr del tiempo aparecieron otras iglesias protestantes y sectas que a partir del año 1970 han invadido todo los países de América Latina y también Paraguay, entre ellas podemos citar algunas: Pentecostales, Asamblea de Dios, los Metodistas, Bautistas y los Mennonitas, que de manera radical rechazan el bautismo de los niños y se resisten a las leyes civiles, alegando que son contrarias a la Palabra de Dios.
POSTURAS Y CONTRADICCIONES
Una de las doctrinas principales de las iglesias protestantes y las sectas es "la salvación por la fe sola". Es decir, basta tener fe, basta creer para que seamos definitivamente salvos para que nuestros nombres queden definitivamente escritos en el libro de la vida.
Lutero fue el propiciador de esta doctrina. El encontraba mucha dificultad para cumplir los mandamientos de Dios, entonces para tranquilizar su conciencia inventó la doctrina de la salvación por la fe sola. Para salvarse no es necesario el esfuerzo del hombre para cooperar con la gracia ni las buenas obras. Para justificar dicha doctrina, al traducir el capitulo 3, versículo 28 de la Carta de San Pablo a los Romanos: "Concluimos, pues, que el hombre es justificado por la fe sin las obras de la ley", Lutero añadió la palabra "solo" antes de la palabra "fe" cambiando de esa manera su sentido original.
Según Lutero, el hombre está esencialmente corrompido, no puede hacer ninguna obra buena, no puede acumular méritos sino pecados. La fe de Lutero, que no se distingue de una simple confianza, no exige al hombre ni el arrepentimiento ni las buenas obras.
Según Lutero, el hombre con solo aceptar a Cristo ya está definitivamente salvado. Cristo ya hizo todo. Ya pagó por todos nuestros pecados. Esta misma doctrina de Lutero continúan predicando hoy día las iglesias protestantes y las sectas. Es una doctrina fácil y cómoda que muchos aceptan con entusiasmo, porque no exige la confesión, las buenas obras ni la reparación.
Si basta la fe para salvarse, como dice Lutero, es evidente que no es necesario cumplir los mandamientos. Lutero llegó a decir que Jesucristo suprimió los mandamientos en vista de que no podríamos observarlos. Si fuese verdad esta afirmación, no tendría sentido que Jesucristo hubiera fundado la Iglesia. Sería inútil que hubiera instituido el sacramento del bautismo, que diera poder de perdonar los pecados y que instituyera la eucaristía. No sería necesario ninguno de los sacramentos.
Esta doctrina, por consiguiente, es falsa porque mutila lo esencial del evangelio, lo esencial de la doctrina enseñada por Jesucristo y predicada por los apóstoles y la Iglesia Católica.
La identidad de los católicos
1- Tienen conciencia de que pertenecen a la verdadera iglesia fundada por Jesucristo.
2- Tienen un amor filial al vicario de Cristo, el Papa, quien es sucesor de San Pedro primer Papa de la Iglesia.
3- Viven en comunión con sus pastores legítimos, el obispo el párroco y sus representantes.
4- Son fieles a la Biblia y a la tradición interpretadas por la iglesia jerárquica.
5- Frecuentan los sacramentos de la confesión (penitencia) y la comunión (eucaristía).
6- Honran a la Virgen María con el rezo del santo rosario y otras prácticas marianas.
7- Participan asiduamente de la santa misa.
8- Viven no solo en el amor de Dios, sino también en el amor al prójimo.
9- Buscan el progreso material y espiritual de su comunidad y participan de las actividades comunitarias.
10- Respetan a los que practican otras religiones, aunque no aceptan sus errores.
Características de algunos protestantes
1- No se ciñen al evangelio: Sus doctrinas fundamentales van en contra de la Biblia y el sentido común.
2- Interpretan mal la biblia: Al interpretarla literalmente, a su manera, le hacen decir a la Biblia lo que a ellos les conviene.
3- Divides a los cristianos: Van creando innumerables sectas que se multiplican cada día más.
4- Buscan la salvación solamente después de la muerte: El reino de Dios no tendría ninguna relación con nuestra historia terrena.
5- Adoptan una actitud fatalista: Para salvarse solamente es necesario la fe en Jesucristo, las buenas obras no son necesarias.
6- Se aprovechan de la ignorancia y la pobreza del pueblo: Llegado el caso no dudan en comprar la conciencia de la gente sencilla.
7- Utilizan un proselitismo excesivo: Presionan sicológicamente a la gente con sus insistentes propagandas con el fin de atraerlos a la nueva fe que predican.
8- Hacen mucho apostolado: No tienen vergüenza de predicar a Cristo en todas partes, sin embargo, no pocas veces caen en el fatalismo ciego.
9- Insisten en la vida comunitaria: Tienen conciencia de que la Iglesia se vive en comunidad, sin embargo muchos grupos se fanatizan y desprecian a los que no piensan ni viven como ellos.
10- Luchan contra los vicios: Tratan de vencer el alcohol, las drogas, el tabaco, entre otros, sin embargo les envenenan el alma con doctrinas contradictorias a su misma fe.
SACERDOTE DICE QUE ES TIEMPO DE HUMILDAD
CAACUPE (de nuestra redacción regional). El presbítero Tomás Mendieta, de la diócesis de Caacupé, dijo estar sorprendido por la declaración de Nicanor Duarte Frutos. Más aun por haberlo hecho después de la contienda electoral y de haber logrado una victoria importante. Es el tiempo de la humildad, de sentarnos todos juntos, incluso si hubo ofensas o agravios es también tiempo de perdonar como él mismo expresó, acotó.
Señaló que antes, durante, ni después de la contienda electoral no escuchó ninguna palabra o expresión ofensiva hacia los candidatos, ni siquiera entre los propios candidatos y menos aun por parte de los obispos y sacerdotes.
Instó a aprovechar la nueva ilusión y esperanza que tiene el pueblo, unirnos entre todos y romper ese círculo de agresión y confrontación que caracteriza al pueblo paraguayo y que hace que el atraso y la pobreza se enraícen mucho más todavía.
Próxima entrega: El pastor Simons y sus seguidores.
Todo empezó después del año 1500 con Martín Lutero, ex sacerdote católico, quien abandonó su ministerio para contraer matrimonio civil con una monja. Se apartó de la Iglesia Católica negando gran parte de las verdades de la fe y empezó una lucha muy violenta contra la Iglesia Católica.
En la misma época el rey Enrique VII, de Inglaterra, se separó de la Iglesia Católica porque el Papa se opuso a su propósito de contraer nuevo matrimonio separándose de su esposa legítima. Muy pronto obligó a todos los ingleses a que abrazaran la nueva religión, el Anglicanismo, desatándose al mismo tiempo una cruel persecución contra todos los católicos.
Con el correr del tiempo aparecieron otras iglesias protestantes y sectas que a partir del año 1970 han invadido todo los países de América Latina y también Paraguay, entre ellas podemos citar algunas: Pentecostales, Asamblea de Dios, los Metodistas, Bautistas y los Mennonitas, que de manera radical rechazan el bautismo de los niños y se resisten a las leyes civiles, alegando que son contrarias a la Palabra de Dios.
POSTURAS Y CONTRADICCIONES
Una de las doctrinas principales de las iglesias protestantes y las sectas es "la salvación por la fe sola". Es decir, basta tener fe, basta creer para que seamos definitivamente salvos para que nuestros nombres queden definitivamente escritos en el libro de la vida.
Lutero fue el propiciador de esta doctrina. El encontraba mucha dificultad para cumplir los mandamientos de Dios, entonces para tranquilizar su conciencia inventó la doctrina de la salvación por la fe sola. Para salvarse no es necesario el esfuerzo del hombre para cooperar con la gracia ni las buenas obras. Para justificar dicha doctrina, al traducir el capitulo 3, versículo 28 de la Carta de San Pablo a los Romanos: "Concluimos, pues, que el hombre es justificado por la fe sin las obras de la ley", Lutero añadió la palabra "solo" antes de la palabra "fe" cambiando de esa manera su sentido original.
Según Lutero, el hombre está esencialmente corrompido, no puede hacer ninguna obra buena, no puede acumular méritos sino pecados. La fe de Lutero, que no se distingue de una simple confianza, no exige al hombre ni el arrepentimiento ni las buenas obras.
Según Lutero, el hombre con solo aceptar a Cristo ya está definitivamente salvado. Cristo ya hizo todo. Ya pagó por todos nuestros pecados. Esta misma doctrina de Lutero continúan predicando hoy día las iglesias protestantes y las sectas. Es una doctrina fácil y cómoda que muchos aceptan con entusiasmo, porque no exige la confesión, las buenas obras ni la reparación.
Si basta la fe para salvarse, como dice Lutero, es evidente que no es necesario cumplir los mandamientos. Lutero llegó a decir que Jesucristo suprimió los mandamientos en vista de que no podríamos observarlos. Si fuese verdad esta afirmación, no tendría sentido que Jesucristo hubiera fundado la Iglesia. Sería inútil que hubiera instituido el sacramento del bautismo, que diera poder de perdonar los pecados y que instituyera la eucaristía. No sería necesario ninguno de los sacramentos.
Esta doctrina, por consiguiente, es falsa porque mutila lo esencial del evangelio, lo esencial de la doctrina enseñada por Jesucristo y predicada por los apóstoles y la Iglesia Católica.
La identidad de los católicos
1- Tienen conciencia de que pertenecen a la verdadera iglesia fundada por Jesucristo.
2- Tienen un amor filial al vicario de Cristo, el Papa, quien es sucesor de San Pedro primer Papa de la Iglesia.
3- Viven en comunión con sus pastores legítimos, el obispo el párroco y sus representantes.
4- Son fieles a la Biblia y a la tradición interpretadas por la iglesia jerárquica.
5- Frecuentan los sacramentos de la confesión (penitencia) y la comunión (eucaristía).
6- Honran a la Virgen María con el rezo del santo rosario y otras prácticas marianas.
7- Participan asiduamente de la santa misa.
8- Viven no solo en el amor de Dios, sino también en el amor al prójimo.
9- Buscan el progreso material y espiritual de su comunidad y participan de las actividades comunitarias.
10- Respetan a los que practican otras religiones, aunque no aceptan sus errores.
Características de algunos protestantes
1- No se ciñen al evangelio: Sus doctrinas fundamentales van en contra de la Biblia y el sentido común.
2- Interpretan mal la biblia: Al interpretarla literalmente, a su manera, le hacen decir a la Biblia lo que a ellos les conviene.
3- Divides a los cristianos: Van creando innumerables sectas que se multiplican cada día más.
4- Buscan la salvación solamente después de la muerte: El reino de Dios no tendría ninguna relación con nuestra historia terrena.
5- Adoptan una actitud fatalista: Para salvarse solamente es necesario la fe en Jesucristo, las buenas obras no son necesarias.
6- Se aprovechan de la ignorancia y la pobreza del pueblo: Llegado el caso no dudan en comprar la conciencia de la gente sencilla.
7- Utilizan un proselitismo excesivo: Presionan sicológicamente a la gente con sus insistentes propagandas con el fin de atraerlos a la nueva fe que predican.
8- Hacen mucho apostolado: No tienen vergüenza de predicar a Cristo en todas partes, sin embargo, no pocas veces caen en el fatalismo ciego.
9- Insisten en la vida comunitaria: Tienen conciencia de que la Iglesia se vive en comunidad, sin embargo muchos grupos se fanatizan y desprecian a los que no piensan ni viven como ellos.
10- Luchan contra los vicios: Tratan de vencer el alcohol, las drogas, el tabaco, entre otros, sin embargo les envenenan el alma con doctrinas contradictorias a su misma fe.
SACERDOTE DICE QUE ES TIEMPO DE HUMILDAD
CAACUPE (de nuestra redacción regional). El presbítero Tomás Mendieta, de la diócesis de Caacupé, dijo estar sorprendido por la declaración de Nicanor Duarte Frutos. Más aun por haberlo hecho después de la contienda electoral y de haber logrado una victoria importante. Es el tiempo de la humildad, de sentarnos todos juntos, incluso si hubo ofensas o agravios es también tiempo de perdonar como él mismo expresó, acotó.
Señaló que antes, durante, ni después de la contienda electoral no escuchó ninguna palabra o expresión ofensiva hacia los candidatos, ni siquiera entre los propios candidatos y menos aun por parte de los obispos y sacerdotes.
Instó a aprovechar la nueva ilusión y esperanza que tiene el pueblo, unirnos entre todos y romper ese círculo de agresión y confrontación que caracteriza al pueblo paraguayo y que hace que el atraso y la pobreza se enraícen mucho más todavía.
Próxima entrega: El pastor Simons y sus seguidores.