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Wagner indicó que la imposibilidad del Senado de rechazar el proyecto de ley que blanquea la situación de las personas que, sin ser sujetas de la reforma agraria, ocuparon varias fracciones de las 224.000 hectáreas de Antebi Cue, motivará graves conflictos.
Destacó que lo hecho por el Congreso, con el proyecto de ley que tuvo origen en la Cámara de Diputados, es ceder prácticamente la soberanía del Estado a los delincuentes en la zona Norte del país, es decir en Concepción, San Pedro y Amambay.
Destacó que lo notable es que a los pequeños productores paraguayos no se dio ninguna salida y el problema será que quien tenga mayor fuerza se quedará con las propiedades, sin importar que sean o no sujetos de la reforma agraria.
El legislador señaló que las publicaciones sobre lo que ocurre en el lugar demuestran que hay algunos funcionarios del Indert que actúan como agentes inmobiliarios que negocian las tierras al mejor postor.
Indicó que este territorio es base de las pistas clandestinas de narcotraficantes, dado que es un lugar ideal para el efecto. Destacó que en la zona los pobladores saben que regularmente aterrizan aviones y así lo denunciaron a los legisladores cuando realizaron una visita.
El senador liberal dijo que lógicamente los delincuentes no querrán que nadie “moleste” y no permitirán que permanezcan gente que los pueda denunciar.
Señaló que, por ese motivo, fue llamativa la actitud de legisladores que tienen conocimiento de lo que ocurre ahí, como el senador colorado Arnoldo Wiens, quien presidió la comisión especial que investigó el asesinato del periodista Pablo Medina y de Antonia Almada, el año pasado.
Wagner consideró evidente que la aprobación de este proyecto contó con el aval del Poder Ejecutivo, ya que antes de la votación, el pasado jueves, se retiró la senadora Lilian Samaniego, presidenta del Partido Colorado y otros legisladores del mismo partido.
Además, destacó que ninguno de los que estaban a favor o se abstuvieron de votar fundamentaron ni defendieron la aprobación del proyecto sino que algunos optaron por “huir”.
Advirtió que se pueden producir hechos violentos, dado que los mafiosos querrán poner su gente, desalojando a campesinos, lo cual puede tener consecuencias incontrolables.