Cargando...
Con esto se refuerza la teoría de que la pesquisa por la fortuna que la familia no podría justificar va camino al oparei.
A esta conclusión se llega por el solo hecho de que los Díaz Verón lograron apartar a tres fiscales de Delitos Económicos y la adjunta resolvió conformar ayer un equipo de trabajo con los fiscales Leonardi Guerrero y Martín Cabrera (designado como interino antes), que sería del agrado y a medida del exmandamás del Ministerio Público.
Con respecto a la intervención de Aghemo, Alba Cantero le dio la razón al abogado Daniel Sosa Valdez, representante de Alejando Díaz Morínigo, hijo de Javier Díaz Verón y su esposa María Selva Morínigo.
La fiscala había reconocido una amistad de años con el citado profesional, pero recalcó que su desempeño y decisiones se fundan en “estricto cumplimiento del derecho y objetividad”.
Sin embargo, la adjunta consideró que podía afectar su objetividad.
Los fiscales anteriormente apartados son Yolanda Portillo, quien se inhibió del abogado Mario Elizeche Baudo (representante de María Selva), y José dos Santos, recusado por la esposa de Díaz Verón por haberla citado a indagatoria junto con sus hijos Yerutí y Alejandro Díaz Morínigo.
Si bien Dos Santos fue confirmado, esa resolución se impugnó ante la Corte.
La familia Díaz Verón es dueña de una empresa (Canto Rodado) que tiene un capital de G. 2.500 millones y otros bienes que no podría justificar.