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Varios diputados, como los colorados Juan Carlos Baruja y Óscar Tuma, se opusieron a la iniciativa, señalando que no podía legalmente modificar un rubro presupuestario, dado que eso sería una malversación de fondos.
El diputado Tuma indicó que, en todo caso, si existía una decisión consensuada de otorgar una ayuda especial a los compatriotas que están pasando por este drama, se podía pedir a la presidencia de la cámara que descuente G. 1 millón a cada diputado para ser entregado a la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN). Apuntó que la propuesta no era un acto de desprendimiento sino más bien querer hacer caridad con dinero ajeno.
Por su parte, el colorado Walter Harms dijo que todos los diputados estaban sensibilizados por la situación de miles de compatriotas, pero que no se iba a solucionar la situación con propuestas “populistas” y que además podía ser un antecedente peligroso. Indicó que las instituciones a cargo del Poder Ejecutivo estaban haciendo un gran esfuerzo para paliar la situación y que, en todo caso, los legisladores debían consultar la forma de colaborar.
Finalmente, ante la falta de respaldo de la gran mayoría, el proyecto fue girado a comisiones.