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El examen especial corresponde a la gestión de la entonces titular del MEC, Marta Lafuente. El informe del órgano contralor evidenció que el saldo de la cuenta contable Existencias Bienes de Uso al 31 diciembre 2015, conformaba G. 92.503.348.495 que corresponden a registros realizados en los años 2011, 2012 y 2013 en concepto de equipos de computación, pero que de acuerdo a la verificación física realizada por el equipo auditor, ya no se encuentran en los depósitos del MEC debido a que fueron distribuidos, hecho que demuestra la falta de comunicación oportuna y la absoluta falta de control del movimiento de bienes en depósitos que sirven para resguardo temporal de bienes de uso del ministerio.
Según muestra seleccionada, se constató que en depósitos del MEC se encontraban resguardados 688 notebooks, 45 motocicletas, una heladera, dos cocinas, 44 acondicionadores y evaporadores de aire split, adquiridos en ejercicios anteriores, por G. 1.300.279.201, que no fueron distribuidos para cumplir con los fines propuestos al ser adquiridos.
Asimismo, Contraloría constató la existencia de varios equipos educativos y recreacionales no valorizados por el equipo auditor, teniendo en cuenta que no fue posible identificarlos en la composición del saldo de la cuenta Existencias Bienes de Uso. Agrega Contraloría que los juguetes didácticos y las notebook, si hubieran sido repartidos oportuna y eficientemente, pudieron haber sido de suma utilidad para muchos niños que se encuentran en etapa escolar.
Aclara, además, que en su descargo el MEC remitió actas de entregas en junio de 2016, de 664 notebook a instituciones educativas del departamento de Cordillera.
MEC no tiene título
El informe del órgano contralor señala que hasta el momento de la auditoría no había sido realizada la transferencia del título de propiedad a favor del MEC, del edificio Excelsior, adquirido en el año 2009 por un monto de G. 14.045.123.400, a través de la contratación directa por vía de excepción. No fue incorporado en el inventario de bienes de uso, a pesar de haberse pagado la totalidad del valor de adquisición.