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El excomandante de la Flota de Guerra de la Armada, contralmirante SR Elpidio Morán, rompió el silencio. El 18 de noviembre del año pasado fue acusado en la prensa por el comandante de la Armada, vicealmirante Hugo Scolari, de haberlo amenazado y maltratado verbalmente. “En ese momento no podía decir nada porque estaba en servicio activo; pero ahora ya voy a hablar”, indicó.
Posible candidato
Todo habría empezado cuando el nombre del entonces comandante de la Flota de Guerra, contralmirante Elpidio Morán, empezó a sonar como posible comandante de la Armada en sustitución del actual, Hugo Scolari.
Morán tiene 40 años en las FF.AA. (comenzó a los 12); era el tercero en línea de sucesión tras el almirante Hugo Scolari y el jefe de Estado Mayor, con una brillante foja de servicios. No hay ausencias, pedido de reposos, permisos especiales o extraordinarios; no figuran arrestos y tiene varias condecoraciones, una de ellas dada por el propio Horacio Cartes. Fue, además, mejor egresado naval y número 1 de la promoción 85.
El 3 de noviembre pasado asumió como nuevo comandante de las FF.MM. el Gral. Braulio Piris; esa misma noche, mientras atendía a extranjeros, el contralmirante Morán recibió una llamada de su superior, el vicealmte. Scolari. En ella el comandante de la Armada le comunicó que iba a ascender a otro militar en su lugar, al contralmirante Paulo Gómez, y daba a entender que era por orden superior.
El contralmte. Gómez no solo no tenía la antigüedad requerida, sino que, además, en el 2005 había pedido su pase a retiro temporal. Esto significaba que el comandante de la Flota de Guerra debía ir a retiro después de haber sido el candidato a comandante de la Armada; no iba a quedar ni como jefe de Estado Mayor.
Según Scolari, en aquella llamada Morán lo amenazó e insultó. Según Morán, eso no es cierto: “Él, aparte de marginarme, lo denunció ante la prensa; eso no es normal que haga un comandante que tiene facultades de aplicar una sanción o un arresto en el caso de que un oficial le falte al respeto. No ocurrió eso conmigo”, añadió.
“Todo empezó cuando surgió mi nombre para comandante de la Armada. A partir de ese momento actuó con maldad y abuso de autoridad. Cuando leí en la prensa lo que dijo, me sentí dolido, humillado ante mí mismo, ante mis camaradas, mi familia; una injusticia terrible y maliciosa”, declaró.
Tras pedir habeas data, el contralmte. SR Morán se enteró de que su superior ordenó un sumario en su contra (que nunca se ejecutó) y del cual jamás fue notificado. Ese sumario tiene fecha del mismo día en que Morán entregaba la comandancia a su cargo.
En un buque de baja
Según el contralmirante Morán, la entrega de una comandancia se hace en la unidad donde uno ejerció. Si se cumplía la premisa, el contralmte. Morán debía entregar su comandancia en la Flota de Guerra; pero Scolari ordenó que la entrega y recepción de la comandancia de Morán se hiciera a bordo de un buque dado de baja, a orillas del río.
Fueron invitados unos pocos para la despedida del comandante Morán. “Para mí, fue humillante”, dice, y hace silencio. “Quise llorar al bajar del barco. No merecía… Despedirme de la Armada en esas condiciones fue lo más humillante. Pero estoy seguro de que honré el buen nombre de la institución hasta lo último”.
“El señor comandante de la Armada actuó con maldad, con injusticia, con abuso de autoridad, y violó mis derechos establecidos en la Constitución Nacional, en la Ley 1115 y en el plan de carrera”, dijo ayer. Denunció que se privilegian otros aspectos por sobre la trayectoria, y que en el listado de ascensos para militares están varios con antecedentes. “Estoy dolido y humillado, pero voy a reclamar mi derecho en todas las formas que la ley me lo permita”, aseguró.
Por cierto, el comandante de las FF.MM., Gral. Braulio Piris, confirmó luego al contralmirante Morán que los cambios en la Armada los decidió el vicealmte. Scolari, el mismo que en setiembre del 2016 dijo que él era un brillante militar.
mabel@abc.com.py