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A meses de ubicarse en el cargo de director de Aduanas, Nelson Daniel Valiente Saucedo comenzó una vertiginosa prosperidad, que se tradujo en millonarias inversiones a nombre suyo y de su esposa María Celeste Ayala de Valiente.
Valiente es funcionario del Banco Central del Paraguay (BCP), fue superintendente y también auditor jefe en épocas que hubo fuga de dinero en la tesorería del ente monetario. En agosto del 2013, con el Gobierno del “Nuevo Rumbo” de Horacio Cartes se ubicó como mandamás de Aduanas.
Según documentos de Catastro, en junio del 2014, 10 meses después de convertirse en director de Aduanas, Valiente, bajo la titularidad de su esposa Celeste Ayala, estrenaba una residencia de descanso en la ciudad de San Bernardino. La vivienda rodeada con muralla de ladrillo abarca cinco terrenos, cuatro fueron adquiridos en 2014 y uno el año pasado, según confirmaron en el municipio de esta localidad.
Un año después, en junio del 2015, el próspero director comenzó la construcción de un complejo deportivo en Villa Elisa. El inmueble se extendió a 7.200 m² en abril del 2016, con la compra de un predio colindante.
Durante nuestra visita y una breve conversación con su casero que se identificó como “Roberto”, pudimos visualizar una moderna cancha de fútbol totalmente iluminada, sistema de riego automático, un tractorcito y maquinarias de limpieza. Cuenta con quincho, vestuarios con terraza, un puesto de seguridad, etc.
El progreso de Valiente se da en medio de un alto nivel de vida. No escatima en lujos considerando la costosa camioneta de US$ 65.000 que estrenó este año, mientras que su esposa compró otra de US$ 55.000 en 2015.
Al igual que sus leales de Aduanas, “magos” de las finanzas, Valiente disparó su fortuna con el Gobierno del “Nuevo Rumbo”.
Le llamamos varias veces y le enviamos consulta a través de su jefa de prensa al director Nelson Valiente para preguntarle ¿de dónde sacó la plata?, pero se llamó a silencio.