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Así coincidieron en indicar el ministro interino de Trabajo Guillermo Sosa y el sindicalista Juan Torales, de la Central Nacional de Trabajadores (CNT).
Al celebrar el resultado del primer encuentro en esta instancia de conversaciones entre autoridades del Poder Ejecutivo y dirigentes gremiales, el ministro Sosa dijo que “hay coincidencias en preocupaciones” e indicó que se estableció una “hoja de ruta” para tratar varios puntos en próximas citas.
Juan Torales refirió que se congratulaba por la apertura del Gobierno. Aseguró que seguirán con las conversaciones y que mantendrán su postura sobre las reivindicaciones que plantean los gremios a los cuales representa.
“Esto es un ejercicio de un diálogo social y permanente a donde hemos acudido para instalar los temas”, expresó Torales. Luego afirmó: “Nosotros no renunciamos a las reivindicaciones y consignas que hemos levantado durante la huelga general”. “No venimos para eso”, agregó.
“Tampoco vamos a realizar exigencias en forma radical”, aclaró.
Estas reuniones de trabajo deben servir para “profundizar los debates” en torno al salario, los controles de precios, la libertad sindical y el modelo de desarrollo que necesita el país, manifestó Torales.
“Esta mesa de diálogo es una trinchera de lucha para nosotros”, expresó el mencionado representante de la CNT.
Huelguistas
Por otra parte, la situación de los presos del caso masacre en Curuguaty, que están en huelga de hambre, también se discutió, reveló el ministro Guillermo Sosa.
Indicó que, con relación a los mismos, el Poder Ejecutivo únicamente puede buscar mediaciones porque los internos en huelga de hambre están a cargo del Poder Judicial. En este caso “se debe ver algún tipo de tratamiento de la cuestión humana”, resaltó el funcionario, y señaló que el Gobierno realiza las consultas.