Constructores siguen siendo pistas para la justicia en el caso barcazas

Los presuntos constructores de las barcazas reclamadas por la naviera argentina Samuel Gutnisky siguen siendo pistas intactas para la justicia, si es que existe voluntad de intentar aclarar el caso. Damián Lezcano Quinto, que dijo a la fiscalía haber fabricado varias barcazas, no mostró documentos de la compra de materiales, aunque dijo que tiene las facturas.

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En el expediente judicial abierto sobre las barcazas, existen documentos como solicitudes de construcción y botadura de tres barcazas (Conapar 2010-02, Conapar 2010-03 y Conapar 2010-05) a nombre de Lezcano Quinto, propietario del astillero El Tuku, ubicado en el bañado Tacumbú.
Sin embargo, ante el fiscal Guillermo Zillich Silva, el mismo dijo haber construido con Pablino de Jesús Rossi Fernández también las embarcaciones Nogal y Duff.

Consultado sobre los lugares de dónde compró las chapas de acero naval y demás materiales, expresó que de los locales de Hierro San Luis y Hierro Rayt (posiblemente Hierro Raity) y que cuenta con las facturas correspondientes, y que ambos comercios están ubicados “cerca de Calle Última, hacia Fernando de la Mora”.

Suponiendo que Lezcano Quinto haya construido por lo menos las tres barcazas Conapar para Rufino Ramírez Dittrich, de Naveradi, y Darío Rubén Báez, de San Cayetano, como dijo a la justicia, el astillero El Tuku debió haber estado abarrotado por meses de toneladas de acero, estructuras y trabajadores. Conforme a los pedidos de permiso y botadura de barcazas remitidos a la Prefectura General Naval, Lezcano Quinto llegó a montar simultáneamente dos enormes embarcaciones de 60 metros de largo por 12 metros de ancho y 3,5 m. de altura en su modesto astillero, sin ningún tipo de automatización, ni siquiera tinglado; es decir, los hizo en forma artesanal. Es más, al terminar dos lanchones, fabricó otro en 33 días.

De acuerdo con los documentos, desde el 12 de marzo del 2009 comenzó a construir Conapar 2010-03 hasta el 10 de agosto del 2009, fecha en que solicitó la botadura, pero desde el 18 de mayo de ese año también comenzó el montaje de Conapar 2010-05 hasta el 18 de noviembre. Inmediatamente después, el 3 de diciembre solicita el permiso de construcción de Conapar 2010-02 y ya pide su botadura el 5 de enero del 2010. Semejante movimiento de materiales, las barcazas y hombres trabajando, debieron ocupar mucho espacio, y no se sabe cómo pudieron caber en el predio de El Tuku que a simple vista no es mayor a una cuadra y donde existe además una casa.

En cuanto a la adquisición de materiales, Lezcano Quinto no fue preciso ante la justicia. Hierro San Luis está en San Lorenzo en el Km. 14,5 de la Ruta I, y no cerca de Calle Última, como dijo él. Hierro Rayt no encontramos, o se transcribieron mal sus declaraciones. Existe sí Hierro Raity cerca de Calle Última y la ruta Mcal. Estigarribia.

En Hierro San Luis, que visitamos ayer, nos dijeron que tienen chapa de acero reciclado, pero pedazos y nunca en la cantidad para hacer barcazas. Uno de los directivos dijo no recordar haber vendido cantidades de chapas recuperadas a Lezcano Quinto, a Ramírez Dittrich o Báez. Lezcano Quinto y Rossi Fernández en todos sus pedidos de construcción a la Prefectura señalaban que iban a utilizar chapas de acero recuperado ASTM para montar las barcazas.

En una breve conversación telefónica anterior con Lezcano Quinto, dijo haber construido varias barcazas, pero que no se acordaba cuántas. En los últimos días le volvimos a contactar por teléfono, pero toda su respuesta fue “hable con mi abogado”.

Rossi Fernández, cuando fue consultado por el fiscal Zillich sobre el origen de los materiales, dijo que sus clientes le proveyeron. Este, según los documentos, construyó las barcazas Conapar 2010-01 del 20 de noviembre del 2009 al 31 de diciembre del 2009 en el Varadero Arenera 8 Hermanos, de San Antonio; Conapar 2010-04, del 27 de marzo del 2009 al 12 de octubre del 2009, en la Calería San Cayetano, ubicada en Piquete Cue; y Conapar 2010-06, del 9 de julio del 2009 al 8 de enero del 2010, en astillero Río Verde, San Antonio. También trabajó en forma simultánea pero por lo menos en varias partes, según su versión.

Cap. N. Britos no estaba en el cargo

Por otra parte, el Cap. N. Alfredo R. Britos aclaró que en el año en que supuestamente se construyeron las barcazas reclamadas por Gutnisky a Naveradi no ocupaba el cargo de jefe del Departamento Técnico de la Prefectura, donde se habrían fraguado documentos para simular la construcción, según denuncia. Britos dijo que fue llamado a declarar en el sumario hecho en la Armada en octubre pasado porque en ese momento sí ocupaba el cargo mencionado, en que ya no está ahora.

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