Conare espera el pedido de refugio de las cubanas

El presidente de la Comisión Nacional de Refugiados (Conare), Juan Livieres, informó ayer que aún no recibió un pedido de refugio de las ciudadanas cubanas Lisandra Infiesto Rodríguez y Katherine Acosta Piedra, quienes fueron detenidas con pasaportes panameños el martes último.

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Sostuvo que al no tener elementos, no puede emitir aún juicio respecto al caso.

Las ciudadanas cubanas habían expresado su inquietud por la posibilidad de ser deportadas a Cuba, pues dicen temer represalias de parte del régimen castrista.

El artículo cinco de la Ley 1938 establece que “no procederá la expulsión, devolución o extradición de un refugiado a otro país, sea de origen o de residencia habitual, cuando haya razones fundadas para considerar que se halle en peligro de ser sometido a torturas u otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes, o donde sus derechos esenciales estuvieran en riesgo”.

De los artículos 21 y 22 se desprende que “toda persona que desee solicitar asilo debe manifestar su intención, verbalmente o por escrito, ante cualquier autoridad de un puesto fronterizo, puerto o aeropuerto, a la Secretaría Ejecutiva de la Conare o a la Dirección Nacional de Migraciones.

La Conare está conformada por el Ministerio de Relaciones Exteriores, Interior, Justicia y Trabajo y Seguridad Social, la Comisión de Derechos Humanos de ambas Cámaras del Congreso y representantes de una ONG y del ACNUR, que participan con voz, pero sin derecho a voto.

Cossío

El exgobernador boliviano de Tarija y hoy refugiado en Paraguay, Mario Cossío, vino al país a fines de 2010 y en el 2011 la Conare le otorgó el estatus de refugiado a solicitud del interesado, porque se siente perseguido por el gobierno de Evo Morales. La Fiscalía y el Ejecutivo de La Paz pidió que no se le otorgara el asilo.

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