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Durante una visita a nuestra redacción, Filizzola presentó documentos que hacen al caso en el cual está imputado por lesión de confianza.
En ese contexto, indicó que su administración resolvió que todo el proceso de adquisición de las naves se hizo vía licitación, por subasta la baja electrónica, pese a que tenía la posibilidad de adquirir por compra directa.
En ese contexto fue adjudicada la firma Proibérica SA, propiedad de Guillermo Casado. “La empresa que perdió no presentó ninguna protesta”, señaló.
Indicó que la primera parte del pago que se hizo durante su administración fue con póliza de seguro.
En ese contexto citó que el Gral. Christ presentó un informe en el cual señalaba el buen estado de las máquinas adquiridas.
El referido militar, a pedido del Ministerio del Interior, había ordenado la conformación de un equipo de inspección.
Ese grupo tuvo como comandante a José Pintos Ledesma, quien recientemente declaró ante el fiscal José Dos Santos sobre este caso.
Señaló que en la primera verificación se presentó el manual logístico que es un documento en el que constan las horas de vuelo, por lo que el trabajo lo hicieron con documentos arrimados por la empresa Proibérica.
Sobre este punto, Filizzola dijo a ABC que posteriormente la empresa adjudicada presentó el manual.
Pinto declaró ante la fiscalía en carácter de testigo.
“Las máquinas se encontraban en perfectas condiciones y fueron probadas por el grupo de helicópteros por más de 250 horas de vuelo, sin tener ningún tipo de inconvenientes para todo tipo de misiones que la policía requería, eran máquinas que podían tener el asesoramiento, inspecciones y reparación de la Fuerza Aérea, ya que la misma poseía máquinas iguales”, apuntó al fiscal de la causa.
Luego aclaró: “Tres aeronaves se encuentran con disponibilidad para operaciones, de hecho se encuentran volando, a excepción de una que tiene problemas en el motor”.
Filizzola afirmó que un Comité de Evaluación intervino en el proceso para adjudicar a la empresa ganadora de la licitación.