Luthold (68) volvió a la consideración pública de la manos de Lino Oviedo. Ayer nos recibió en su empresa de San Antonio y nos aseguró que, a parte de ser un leal amigo del general retirado, su designación como candidato a la vicepresidencia se debe al deseo de que el programa de gobierno de Oviedo genere confianza tanto en la inversión nacional como extranjera. “Dar garantías reales a las inversiones, seguridad jurídica, para que generen fuentes de trabajo que es lo que más preocupa”, dijo.

El empresario, que fue embajador en Alemania durante el periodo del presidente Rodríguez y que tuvo años atrás un difundido conflicto con “sintechos” en Fernando de la Mora, considera que Oviedo ya aprendió que debe rodearse de gente de confianza ante las tantas traiciones que sufrió, sobre todo de personas que lograron ingresar al Parlamento gracias al militar retirado.

–En el ambiente político, se dijo que Oviedo optó por un antiguo socio de negocios.

–No, no, no. No tengo negocios con él, absolutamente. Tenemos más de 25 años de amistad. Simplemente una simpatía que ha habido, pero negocios no tengo con él.

–¿Cómo terminó aquel caso de la presunta basura tóxica ingresada al país y en el que lo vincularon con Oviedo?

–Todo fue una falacia. Una mentira orquestada. No existe absolutamente en ningún lugar del Chaco. Y no solo lo he dicho yo, sino el mismo gobierno alemán. A raíz de las publicaciones de acá y también de allá, pedí al ministro de Relaciones Exteriores alemán que hiciera un pronunciamiento sobre el hecho. Y tenemos la certificación de que desde Alemania no se ha embarcado basura tóxica al Paraguay. Eso consta en los archivos de Relaciones Exteriores nuestro. No existió ese hecho.

–Cree que Paraguay necesita una figura con un liderazgo fuerte como Oviedo.

–Necesitamos líderes, y Oviedo es uno de los pocos que en este momento realmente pueden asumir, y la masa, el pueblo, sabe; por eso lo apoya.

–En Unace es considerado el único líder, el que decide todo, y que lo que dice él se hace.

–En cierto modo... El tiene asesores. Yo mismo formaba parte de un grupo de empresarios asesores. Y el hecho de ser fundador del partido le da cierta ascendencia sobre sus colaboradores. Así que el liderazgo que el tiene es realmente un liderazgo fuerte, pero dentro de lo que permiten los estatutos del partido. Unace debe regirse por sus estatutos y no por la voluntad simplemente de una persona.

–¿Qué piensa de aquel estudio sociológico que consideró a Oviedo de tendencia fascista?

- No. Creo que son todas argucias. Tantas mentiras que se levantaron contra él... Este es un invento más de ciertos políticos a quienes realmente él molesta, por su actitud, por su capacidad de trabajo y de organización inigualable. Es una persona firme, decidida, como militar, y se ha visto eso el 2 y 3 de febrero de 1989.

–¿Qué piensa de Lugo? Algunos lo consideran un fenómeno electoral.

–No creo que exista tal fenómeno. En política no surge un fenómeno así de la noche a la mañana. Si bien creó mucha expectativa por la posibilidad de liderar la Concertación, perdió credibilidad al no respetar el acuerdo firmado en ese proyecto.

Por otra parte, Luthold es partidario de inyectar capital privado a empresas del Estado, pero no “entregarlas al mejor postor”. Cree que se debe estudiar caso por caso.