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El resultado preliminar de la pesquisa ordenada por el comandante de la Policía, comisario general director Walter Vázquez, revela que el procedimiento extorsivo efectuado contra una banda de narcotraficantes que descargaba 302 kilos de cocaína en el departamento de San Pedro, estaba en pleno conocimiento del ahora destituido director de Policía local, comisario general inspector Cristino Aranda.
La investigación interna fue encabezada por el subcomandante, comisario general inspector Eladio Sanabria, quien interrogó a varios oficiales y suboficiales en San Pedro. Estos le aseguraron que Aranda organizó el operativo que el viernes de mañana derivaría en un enfrentamiento a tiros entre policías y elementos de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad).
La balacera se produjo en una pista clandestina de aterrizaje en una hacienda situada en el distrito de General Aquino, propiedad de uno de los seis civiles detenidos, Ramón Giménez Velázquez, primo del gobernador de San Pedro Carlos Giménez (ANR).
El comisario general Cristino Aranda, por su parte, dijo ayer a ABC Color que él estaba al tanto pero solo del trabajo de inteligencia que venían haciendo los seis agentes ahora arrestados. Mencionó que el responsable directo de la investigación era el oficial primero Édgar Diosnel Sosa Melgarejo, personal de la Dirección General de Inteligencia, cuyo titular es el comisario general inspector Óscar Pereira (fue de viaje, a Taiwán).
Aranda reconoció que los otros cinco agentes detenidos sí estaban a su cargo, pero que fueron comisionados como apoyo por pedido del propio citado oficial.
El destituido director de Policía declaró que el agente Édgar Sosa le expresó que el fiscal Jorge Encina estaba al tanto de toda su investigación, pero este último negó haber autorizado el operativo en la pista, aunque admitió haber recibido el 8 de mayo último una comunicación por escrito en la que los efectivos consignaron que harían vigilancia preventiva en unas coordenadas distantes 48 kilómetros de la estancia intervenida.
Cristino Aranda dijo que en ningún momento el oficial de Inteligencia le llamó a comunicar que iban a entrar a la estancia donde al final aparecieron los de la Senad.
La fiscala Lorena Ledesma, quien supervisó el operativo “Espada” de la Senad, refirió al respecto que cuando entraron a la pista encontraron a los seis policías conversando con los seis traficantes y que, incluso, uno de los narcos denunció que los uniformados les estaban exigiendo dinero para dejarlos libres.