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La norma fue aprobada en general por lo que los diputados deben culminar su estudio. El objetivo de la iniciativa es transparentar el origen de los “donativos” que reciben los precandidatos en las internas, donde más dinero producto del narcotráfico y lavado de dinero se mueve, para financiar campañas.
El proyecto si bien establece requisitos, plazos y fija límites para las donaciones, no determina qué institución se encargará de examinar los documentos presentados por los precandidatos y candidatos durante las elecciones internas y generales. Ignoran la intervención de la Secretaría de Prevención contra el Lavado de Dinero (Seprelad) y restan atribución a la Contraloría para que realice las auditorías.
Los diputados para no aprobar la norma habían postergado el tratamiento por ocho días para introducir cambios a la ley. Sin embargo, la Comisión de Asuntos Constitucionales, presidida por Ramón Romero Roa; y Legislación, que preside Bernardo Villalba, ambos del cartismo, ni siquiera aportaron más cambios al proyecto de ley.
Villalba, vinculado con el narcotraficante Carlos Antonio Caballero, alias Capilo, despotricó contra el proyecto. Sin embargo, no se preocupó en que su comisión corrija la serie de errores que detalló hace dos sesiones.
A su criterio, el proyecto solo incentivará los aportes ilegales.