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Canillas manifestó al fiscal Juan Leonardi Guerrero que a finales de diciembre del 2016, su amigo Hugo Martínez le comentó que otra persona de nombre Franco González tenía un celular al cual le habían agregado a un grupo de WhatsApp denominado S.O.S. Paraguay, que tiene como administradora a la senadora Desirée Masi.
Canillas agregó que González le dijo que el celular que tenía lo usaba regularmente su esposa. Que desde agosto de 2016, la senadora Masi, creyendo que el número de celular de González pertenecía a la esposa del senador Silvio “Beto” Ovelar, lo incluyó en el grupo de WhatsApp en reiteradas veces.
Entre el 9 y el 10 de enero, Canillas recibió el celular que pertenece a González, y el 13 de enero salió de vacaciones cuando ya sabía del supuesto plan conspiraticio contra el presidente Horacio Cartes.
A su vuelta de vacaciones, Canillas leyó todo el contenido de la conversación de senadores del grupo de WhatsApp, refirió.
Canillas aseguró al fiscal que no ha alterado el teléfono, tocado o manipulado alguna frase, fotos o notas de voz que pertenecen al grupo de senadores.
La denuncia ante la Fiscalía la presentó el 27 de enero, con un acta notarial de transcripción de la conversación de los senadores, certificado por la escribana Gladys Teresita Ibarrola.
La “conspiración”
Según la denuncia penal que presentó Canillas, se puede leer una conversación donde interactúan principalmente los senadores Desirée Masi y Robert Acevedo.
La legisladora comenta que ya no aguantaba la situación política, y le consulta a Acevedo si sería posible conseguir unos sicarios. Supuestamente el legislador le contesta que era mejor con cuatro bombas, a lo que la senadora le pregunta cuánto va a costar.
Luego, cuando le hacen notar que echándole a Cartes, Acevedo se iba a quedar como presidente de la República, el parlamentario responde: aleluya.
Para el denunciante constituyen delitos de amenaza de hecho punible, incitación a cometer hecho punible, omisión de dar aviso de un hecho punible, entre otros.