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Con seis votos a favor, una abstención y una ausencia, el Comité Nacional para los Refugiados (Conare) revocó el viernes a la tarde el estatus de refugiados que había concedido a los paraguayos prófugos de la Justicia paraguaya, Juan Arrom, Anuncio Martí y Víctor Colmán, acusados del secuestro de María Edith Bordón de Debernardi, ocurrido entre el 16 de noviembre de 2001 y el 12 de enero de 2002.
El Conare revocó el estatus de refugiados políticos concedido por el Brasil a los tres hombres en agosto de 2003. La comisión está conformada por el Poder Ejecutivo, instituciones de Derechos Humanos y de la sociedad civil.
Tras conocerse la resolución, el ministro de Relaciones Exteriores, Luis Castiglioni, informó que el Paraguay envió por valija diplomática el exhorto de extradición, por el cual solicitan que los paraguayos prófugos vengan al país para someterse al juicio oral y públicos que se inició en el 2003.
A fines de ese año, Conare les concedió el estatus de refugiados, en ese entonces en el gobierno de Lula Da Silva.
Según dijeron fuentes vinculadas al Conare, entre los factores que pesaron en contra de los paraguayos estuvo una reciente decisión de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH), que rechazó por unanimidad la demanda contra el Estado entablada por Arrom y Martí por supuesto secuestro y tortura ocurrido en 2002.
La histórica sentencia de la Corte IDH del 13 de mayo pasado concluyó que el Estado “no es responsable de la violación de la convención” de DD.HH. La Corte también rechazó el reclamo de US$ 123 millones de Arrom y Martí.
De acuerdo a la Fiscalía paraguaya, los abogados de los prófugos tienen el plazo de 15 días para presentar un pedido de apelación ante el Ministerio de Justicia brasileño a cargo del ministro Sergio Moro, exjuez del caso Lava Jato.
El Ministerio Público informó que arbitrará todos los medios necesarios para acelerar el proceso de extradición desde el Brasil de los paraguayos prófugos.