Benítez Liseras había pedido permiso de seis meses en las Fuerzas Armadas. Y al parecer no fue precisamente para tomarse un descanso. El hombre cayó, según reporte de las propias fuerzas militares, a bordo de una avioneta con 30 cajas de cigarrillos. Es hermano de otros dos militares de la Fuerza Aérea: Ramón Antonio Benítez Liseras, general de aviación y comandante de la Brigada Aerotransportada, y Luis Hernán Benítez Liseras, director del Comando de Institutos Aeronáuticos de Enseñanza (CIAERE). Este último fue acusado por el teniente coronel Carlos Benegas de haberlo torturado en un confuso episodio por robo de baterías antiaéreas. La Dirección de Aeronáutica Civil (Dinac) otorgó a la avioneta un plan de vuelo muy casero: Montiel Potrero, ubicado en Paraguarí, propiedad de la familia Urrutia Ugarte y Cía. Pero el vuelo se "desvió un poco" y fue a parar a Corrientes, Argentina, donde tuvo un aterrizaje forzoso, según un informe de las Fuerzas Militares. El aterrizaje se produjo en una estancia del Paraje Santo Domingo, en las afueras de Corrientes. Según informó el jefe de Escuadrón 48, los efectivos de esta unidad "ya estaban en alerta" por disponer de informaciones sobre posible tráfico aéreo. Los uniformados correntinos se encontraron con una avioneta que transportaba 1.635 cartones de cigarrillos marca Rodeo y 14 marca 51, informa El Litoral, periódico correntino. De acuerdo a fuentes de Aduanas de la Argentina, la mercadería incautada asciende a unos 100 millones de guaraníes.
En Paraguay las fuerzas militares empezaron a averiguar al recibir una llamada de la esposa de Benítez Liseras, preocupada por el paradero de su marido, según nos informó el vocero militar Elio Flores. El avión que transportaba a Benítez Liseras no contaba con habilitación, según un documento de la DINAC. Y en Corrientes, esto de incautarse de cigarrillos provenientes de Paraguay no es nuevo, como se puede observar en el material adjunto.