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El miércoles 22 fenecieron los mandatos de cinco años de los miembros del TSJE Bestard y Wapenka, quienes asumieron sus funciones el 22 de agosto de 2013. Desde el jueves 23 de agosto usurpan funciones administrando el ente, teniendo en cuenta que no hay reconducción tácita.
Bestard y Wapenka recurrieron a la Corte Suprema de Justicia para que le declaren la inamovilidad hasta la edad de 75 años. Es decir, intentan equipararse a los ministros del máximo organismo judicial.
El Art. 252 de la Constitución Nacional señala que los magistrados que hubiesen sido confirmados por dos periodos siguientes al de su elección, adquieren la inamovilidad en el cargo hasta el límite de edad establecido para los miembros de la Corte (75 años). Mientras aguardan el fallo, trascendió que Wapenka está de viaje como miembro del TSJE y Bestard concurrió ayer a la mañana a su oficina.
Si Bestard y/o Wapenka firman documentos con fecha del 23 de agosto en adelante, estarían cometiendo delitos de prevaricato, usurpación de funciones, expedición de documentos falsos, entre otros.
Wapenka se iría
Según versiones, Bestard sería confirmado en el cargo por la Corte gracias a un acuerdo con el ex presidente de la República Horacio Cartes mientras que a Wapenka le dejaría afuera por dos motivos: 1. falta de respaldo político y 2. porque le darían ese cupo al Frente Guasu (FG), que es la tercera fuerza política, a juzgar por la cantidad de legislador en el Congreso. El FG pactó con los colorados para impulsar esta iniciativa.
“Blanqueados”
Bestard, Wapenka y Alberto Ramírez Zambonini (PLRA) fueron “blanqueados” por la Fiscalía, que investigó supuestas irregularidades cometidas por cobro de viáticos. Además, Wapenka tuvo un caso similar al de los caseros de oro; Bestard favoreció con un meteórico ascenso a una guardia amiga suya, Fredesvinda Barrios, y Ramírez estuvo involucrado en caso de planillerismo encabezado por su amigo Manuel Radice.
El TSJE dispone de un presupuesto anual de US$ 90 millones y tienen un plantel de 7.000 funcionarios en su mayoría “recomendados”. Dicha cifra puede duplicarse en época electoral.