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El fiscal Alcides Corvalán remitió la carpeta fiscal de tráfico de influencias a la Unidad de Delitos Económicos, y la causa ya está a cargo de los fiscales Josefina Aghemo, Claudia Morys y Martín Cabrera.
Como primera actividad, los citados fiscales de la unidad especializada identificarán los casos judiciales que están contenidos en los hechos de imputación.
De igual manera, los nuevos agentes realizarán la clasificación de las grabaciones de voz para trazar una línea investigativa.
No se descarta que haya más imputados
Según como vaya la pesquisa del Ministerio Público en este escandaloso hecho, no se descarta que pueda haber más imputados.
Varios fiscales y abogados particulares estarían aún en la mira de la Fiscalía porque habrían tenido participación en los delitos evidenciados.
El escándalo de los audios produjo el procesamiento de los ahora exsenadores Óscar González Daher y Jorge Oviedo Matto, de los abogados Carmelo Caballero y Rubén Darío Silva así como del entonces secretario del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados (JEM) Raúl Fernández Lippmann.
González Daher y Oviedo Matto fueron procesados por los delitos de asociación criminal, tráfico de influencias y cohecho pasivo agravado (coima).
Caballero, al igual que Fernández Lippmann, fue imputado por tráfico de influencias, asociación criminal y cohecho pasivo agravado (coima).
Silva fue imputado por soborno agravado, asociación criminal y tráfico de influencias.
Fernández Lippmann, a través de su abogado Álvaro Arias, manifestó hace unas semanas a los medios de comunicación que va a colaborar con la investigación del Ministerio Público, a cambio de recibir alguna salida procesal. Sin embargo, hasta ahora Fernández Lippmann no se acercó a la Fiscalía para hacer tal contribución.