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En la sede de la Embajada de la República Oriental del Uruguay, el diplomático y senador de uruguayo Abreu presentó ayer en Asunción su libro: “La vieja trenza”, que describe la alianza porteño-lusitana en la Cuenca del Plata 1800-1875.
En la presentación, Abreu señala que su obra es un análisis de un proceso histórico, no solamente con miradas hacia el pasado sino como proyección de las vivencias del presente y el futuro. “No es un libro quejumbroso sino de descripciones, donde obviamente pueden existir muchas opiniones pero lo que marca un trazo histórico”, expresó.
Según el excanciller uruguayo, “hoy esta vieja trenza, mirada desde el punto de vista bilateral, también es la que decide”. Agregó que no habrá cambio de rumbo en el Mercosur, si Brasil está en contra o si la Argentina está en contra. Es decir, socios grandes del bloque deciden qué hacer con el proceso de integración integrado también por Paraguay, Uruguay Venezuela.
Manifestó que “la trenza bilateral lusitana-porteña” se mantiene en coincidencia de los intereses aun en la discrepancia de que permanezca una sintonía que pueda predominar sobre determinadas conductas de países más chicos. “No es una crítica quejumbrosa, es la realidad. Entonces cuando eso suceda en distintas manifestaciones históricas, uno lo mira, es la continuación de los intereses de grandes países, que tratan de condicionar la conducta de los otros, que intervienen en los asuntos internos de otros países. Esa vieja trenza hay que vivirla, administrarla y orientarla a nuestro favor”, dijo.