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El mismo dijo que su gremio, así como otras organizaciones del sector productivo de Paraguay y de la Argentina, ha presentado a través del Ministerio de Relaciones Exteriores de nuestro país notas de rechazo hacia esa pretensión, proponiendo dejarla sin efecto.
Según los datos, en el caso que se materialice el cobro del peaje por parte de la Argentina, toda la carga que baje desde Brasil, Bolivia y Paraguay tendrá un incremento de costo de entre US$ 0,50 a 1 US$ por tonelada, lo que tendría un gran impacto económico para la exportación.
Muñoz comentó que si bien se han realizado trabajos de mejoramiento en dicho tramo, los mismos no propician un mejoramiento en el servicio de la navegación para los convoyes.
Explicó que dicho tramo de la hidrovía es navegable normalmente durante el 70% del año y que el peaje impactaría fuertemente sobre las exportaciones, principalmente la soja, como una suerte de gravamen de US$ 1,40 por toneladas.
Por su parte, la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco), presidida por José Berea, también presentó una nota sobre el tema a la Cancillería Nacional.
El pedido de Capeco señala que apreciaría que la Cancillería paraguaya pudiera tomar recaudos necesarios para evitar la materialización del señalado proyecto, expresando su preocupación ante sus pares del vecino país.
Según estimaciones, el impacto del peaje sería de cerca de US$ 40 millones por año sobre el comercio internacional de Paraguay.