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La invitación estaba fijada para las 13:00. Sin embargo, el homenajeado llegó aproximadamente media hora después. Varios excancilleres y autoridades nacionales estaban presentes, además de parlamentarios. Ya en plena degustación de bocaditos, antes del plato principal, se registró el primer corte de energía eléctrica en el local. Este duró 15 minutos y los funcionarios de Cancillería explicaron que el problema de electricidad se originó por causas de la instalación eléctrica del local.
Ya poco minutos después de servirse la comida principal (lomito a la parrilla con salsa de vino blanco, salvia, manteca y parmesano) el suministro de energía volvió a cortarse, esta vez por espacio de más de una hora. La situación obligó a que los organizadores salieran del local para pedir a gritos la presencia de los técnicos de la ANDE para solucionar el inconveniente.
La desesperación de los funcionarios de la Cancillería paraguaya se hacía cada vez más evidente. Pese a los insistentes llamados a los responsables de la empresa estatal, el local seguía sin energía.
El calor de 32 grados comenzó a sentirse en el restaurante, cuyos mozos encendieron velas para por lo menos dar un poco más de luminosidad al ambiente, aunque varios comensales se quejaron de que esta decisión no hizo más que aumentar la temperatura dentro del local.
Los técnicos de la ANDE llegaron al sitio cuando los invitados se retiraban del local, poco antes de las 15:00. Todos se retiraron antes de que se sirva el postre (mousse de mburucuyá). En el local informaron que el primer apagón fue a causa de la ANDE y que luego se dieron pestañeos que acabaron por dañar las instalación eléctrica del lugar.