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Un total de cinco reportes de indicios de hechos punibles contra el patrimonio fueron remitidos por la Contraloría General de la República a la Fiscalía.
Los municipios en los que se detectaron las irregularidades son Ñacunday (Alto Paraná), San Estanislao (San Pedro), Independencia (Guairá), Carmelo Peralta (Alto Paraguay); y Arroyito (Concepción). Todos son administrados por intendentes colorados.
Más de G. 1.800 millones
Ñacunday fue el municipio en el que se registró el mayor daño patrimonial, según los informes de la Contraloría.
Un examen especial realizado a la utilización de los fondos del Fonacide entre 2014 y 2016 reveló un faltante de más de G. 1.860 millones.
En particular, los auditores hallaron que se libraron cheques sin órdenes de pago ni documentos respaldatorios durante la administración del colorado Pedro Duarte.
Obras fantasmas en Santaní
En Santaní, el daño patrimonial detectado por el ente contralor fue de más de G. 380 millones.
Según las auditorías realizadas por los representantes de la Contraloría, se detectaron obras por los cuales se realizaron millonarios desembolsos pero que en realidad nunca se realizaron o se realizaron con baja calidad.
Las irregularidades se habrían cometido entre 2015 y 2016.
Rifaron combustible
En el caso de Colonia Independencia, el daño patrimonial oscila los G. 208 millones, de acuerdo al informe de la Contraloría.
De acuerdo a los resultados de la auditoría, entre mayo y agosto de 2015, se ordenó el pago de más de G. 208 millones en concepto de combustibles.
“La administración municipal no cuenta con documentos e informes detallados sobre la utilización de combustibles y lubricantes”, afirma el documento.
Aulas fantasmas en Carmelo Peralta
En Carmelo Peralta, Alto Paraguay, los auditores detectaron que el municipio pagó más de G. 2.000 millones por aulas. Sin embargo, nunca se entregaron obras cuyo valor oscilaba los G. 550 millones.
Finalmente, en el distrito de Arroyito, se detectaron irregularidades por G. 488 millones pues se pagaron por obras para la construcción de aulas, baños y hasta una cancha, pero las mismas se realizaron con calidad muy baja con respecto a lo que se pagó.