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El incidente se produjo en la noche del lunes último cuando bomberos voluntarios estaban, desde una lancha varada en la orilla del río Paraná, lado paraguayo, tratando de sofocar un incendio en el Paraná Country Club de Hernandarias, Alto Paraná, según denunció Carlos González Airaldi, director de seguridad del club privado.
La Policía Federal del Brasil se acercó a la embarcación e hizo disparos intimidatorios a menos de 50 metros de la vera del río, es decir, ya completamente en jurisdicción paraguaya, conforme a González Airaldi. El mismo relató que una de las balas rebotó en el agua y pasó cerca de uno de los bomberos.
En canciller Rivas Palacios, consultado ayer sobre el incidente, comentó que desde el Ministerio de Relaciones Exteriores ya habían contactado con el Consulado paraguayo en Foz de Yguazú, Brasil, y con la Embajada paraguaya, en Brasilia, para recabar informaciones oficiales. Dijo que también pidieron datos al enlace de la Armada paraguaya. Pero no le convocó al embajador brasileño Carlos Alberto Simas Magalhaes como se acostumbra ante este tipo de casos de violación de soberanía.
Rivas solo señaló que una vez obtenida la información oficial hablarán con las autoridades brasileñas “para evitar que esto se repita”.
Tibia reacción de RR.EE.
Resulta llamativa la conducta del ministro porque comentó que hasta la Policía Federal del Brasil reconoció que cometió “una equivocación”. Insistió en que estaban aguardando el informe oficial y luego contactar con las autoridades del vecino país para que “esto no se repita nunca más”.
El jefe de seguridad del club privado dijo que los brasileños sabían que los bomberos estaban intentando apagar el fuego.
Incidentes frecuentes
Los incidentes por incursiones de las fuerzas públicas brasileñas, sobre todo en ríos que compartimos con el Brasil, son frecuentes. En marzo del año pasado dos humildes trabajadores indígenas ishir, pobladores del distrito de Fuerte Olimpo, Alto Paraguay, fueron detenidos por la Policía Federal del Brasil y encarcelados en Puerto Murtinho. Los mismos venían en una canoa de un establecimiento, donde trabajaban, pero al tener una escopeta fueron acusados de portar arma en forma ilegal. El cacique ishir Francisco Franco denunció que los policías brasileños ingresaron en territorio paraguayo para realizar el procedimiento con lo que violaron la soberanía paraguaya.