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La comisión de Asuntos Constitucionales emitió dos dictámenes; en mayoría por el rechazo y en minoría por la aceptación del veto. Se expidieron a favor de la objeción al proyecto de ley Jorge Ávalos Mariño (PLRA) y la diputada Kattya González (PEN).
En tanto, firmaron por el rechazo del veto los diputados cartistas Derlis Maidana, Walter Harms, Cristina Villalba y el liberal llanista Manuel Trinidad.
El revés del Poder Ejecutivo se produce en el interior de la misma bancada oficialista que ayer no pudo llegar a un acuerdo para aceptar el veto del Ejecutivo y resolvió liberar los votos.
El proyecto de ley que reglamenta el artículo 201 de la Constitución Nacional, sobre pérdida de investidura, establece que debe haber una mayoría absoluta en cada Cámara del Congreso para expulsar a un diputado o senador. Eso implica que en la Cámara de Diputados se requerirá de 41 votos y en el Senado 23 votos. Los legisladores plantean por ley una mayoría no requerida en la Constitución Nacional y fijan la mayoría absoluta. La Carta Magna, en su artículo 185, es clara al señalar que cuando no se establece una mayoría calificada se aplica la mayoría simple; es decir la mitad más uno de los presentes en cada Cámara.
La violación del artículo 185 de la Constitución Nacional fue el principal argumento del presidente Mario Abdo Benítez para vetar la norma. Para rechazar el veto del Ejecutivo se requieren 41 votos. De no obtenerse esa mayoría, la objeción queda firme y el proyecto de ley pasará al archivo.
Sobre el veto del Ejecutivo
El artículo 209 de la Constitución Nacional señala que “si un proyecto de ley fuese rechazado totalmente por el Poder Ejecutivo, volverá a la Cámara de origen, la cual lo discutirá nuevamente”. En este caso el trámite se inicia en la Cámara de Diputados.
“Si esta confirmara la sanción inicial por mayoría absoluta, pasará a la Cámara revisora; si esta también lo aprobase por igual mayoría, el Poder Ejecutivo lo promulgará y publicará”. Si ambas Cámaras rechazan el veto, se aplicará la ley. “Si las Cámaras disintieran sobre el rechazo total, el proyecto no podrá repetirse en las sesiones de ese año”. Si Diputados rechaza el veto y el Senado lo acepta, hasta dentro de un año no podrá volver a tratarse.