Castillo se quejó que sus correligionarios del partido oficialista le abandonaron en el momento en que más necesitaba de ellos, y dijo que solo salió adelante con la ayuda de sus familiares y de algunos seres queridos.
Castillo obtuvo la suspensión condicional del proceso luego de ofrecer en donación G. 7.500.000 a doce entidades de beneficencia, lo que totaliza unos G. 90.000.000. El Hogar de Ancianos y Hogar de Niños Hermana Bernardita, la Fundación Remar, Hogar Infantil Santa Teresita, Hogar de Menores San Francisco de Asís, Pequeño Cottolengo Don Orione, entre otros, son los beneficiados. De igual manera, Castillo devolvió al Ministerio de Educación y Cultura unos G. 137.000.000, ofrecidos por medio de una propiedad inmobiliaria en San Bernardino.