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El oficial 1° de la Policía Gustavo David Errecarte Morales, arrestado en junio del año pasado por el asalto a la casa del empresario Bernardino Hugo Sosa y la conductora de televisión Magalí Sosa, presentó como testigo en una querella contra las víctimas por difamación e injuria a varios camaradas, entre ellos a los agentes que lo detuvieron por ese atraco.
En la madrugada del 12 de junio del año pasado una gavilla asaltó y tomó de rehén en su casa del barrio San Vicente de la capital al empresario Bernardino Hugo Sosa, a su hija Magalí Sosa, quien es bailarina y conductora de televisión, y otros miembros de la familia.
Los delincuentes se alzaron con 5.000 dólares, una pistola, electrodomésticos y un automóvil BMW de color gris, que luego fue abandonado.
Días después del hecho, el oficial 1° Gustavo David Errecarte, quien prestaba servicios en la comisaría 3ª Central de Luque, fue arrestado como uno de los integrantes de la banda, luego de que Magalí Sosa lo reconociera. Efectivos de la sección Robos y Hurtos de Investigación de Delitos, a cargo del subcomisario Tomás Paredes Palma, realizaron la intervención.
Errecarte fue imputado por la fiscala Teresa Rojas por el delito de robo agravado, al igual que otros supuestos implicados como el delincuente Carlos Alberto Silva.
Sin embargo, llamativamente, el agente fue sobreseído del caso y quedó en libertad el 12 de noviembre del año pasado, luego de permanecer arrestado en la Agrupación Especializada.
Con patrocinio de su abogado Florencio Díaz, el agente presentó una querella autónoma por difamación e injuria contra el empresario Bernardino Hugo Sosa y su hija Magalí Sosa. El expediente ingresó a la Meza de Entrada del Poder Judicial el 15 de diciembre de 2009, conforme a los datos.
Luego de relatar los antecedentes, circunstancias y consecuencias del caso, el oficial Errecarte citó nueve testigos. Llamativamente, entre ellos figuran el Crio. Princ. Pablino Vera y el Crio. Fidencio Jacquet, jefe y subjefe de la comisaría 3ª de Luque. Igualmente aparece el subcomisario Tomás Paredes Palma, jefe de Robos y Hurtos de Investigación de Delitos, quien encabezó el operativo para la detención de Errecarte como cabecilla de la banda de asaltantes.
Vera y Jacquet, como superiores de Errecarte, aparentemente pretenden apoyarlo en la querella, pese a que fue reconocido por una de las víctimas del atraco.
G. 1.500 millones
Luego de surgir como uno de los sospechosos de asaltar al empresario Bernardino Hugo Sosa y a la bailarina y presentadora Magalí Sosa, el oficial Gustavo David Errecarte pretende cobrar en carácter de composición por daños y perjuicios la suma de G. 1.500 millones.
Entre los daños causados citó en el expediente la privación de libertad, violación de derechos humanos y frustración de ascenso en la carrera policial.
El agente indicó en el escrito que por la denuncia falsa y calumniosa estuvo preso en las peores condiciones, con delincuentes comunes.
En la madrugada del 12 de junio del año pasado una gavilla asaltó y tomó de rehén en su casa del barrio San Vicente de la capital al empresario Bernardino Hugo Sosa, a su hija Magalí Sosa, quien es bailarina y conductora de televisión, y otros miembros de la familia.
Los delincuentes se alzaron con 5.000 dólares, una pistola, electrodomésticos y un automóvil BMW de color gris, que luego fue abandonado.
Días después del hecho, el oficial 1° Gustavo David Errecarte, quien prestaba servicios en la comisaría 3ª Central de Luque, fue arrestado como uno de los integrantes de la banda, luego de que Magalí Sosa lo reconociera. Efectivos de la sección Robos y Hurtos de Investigación de Delitos, a cargo del subcomisario Tomás Paredes Palma, realizaron la intervención.
Errecarte fue imputado por la fiscala Teresa Rojas por el delito de robo agravado, al igual que otros supuestos implicados como el delincuente Carlos Alberto Silva.
Sin embargo, llamativamente, el agente fue sobreseído del caso y quedó en libertad el 12 de noviembre del año pasado, luego de permanecer arrestado en la Agrupación Especializada.
Con patrocinio de su abogado Florencio Díaz, el agente presentó una querella autónoma por difamación e injuria contra el empresario Bernardino Hugo Sosa y su hija Magalí Sosa. El expediente ingresó a la Meza de Entrada del Poder Judicial el 15 de diciembre de 2009, conforme a los datos.
Luego de relatar los antecedentes, circunstancias y consecuencias del caso, el oficial Errecarte citó nueve testigos. Llamativamente, entre ellos figuran el Crio. Princ. Pablino Vera y el Crio. Fidencio Jacquet, jefe y subjefe de la comisaría 3ª de Luque. Igualmente aparece el subcomisario Tomás Paredes Palma, jefe de Robos y Hurtos de Investigación de Delitos, quien encabezó el operativo para la detención de Errecarte como cabecilla de la banda de asaltantes.
Vera y Jacquet, como superiores de Errecarte, aparentemente pretenden apoyarlo en la querella, pese a que fue reconocido por una de las víctimas del atraco.
G. 1.500 millones
Luego de surgir como uno de los sospechosos de asaltar al empresario Bernardino Hugo Sosa y a la bailarina y presentadora Magalí Sosa, el oficial Gustavo David Errecarte pretende cobrar en carácter de composición por daños y perjuicios la suma de G. 1.500 millones.
Entre los daños causados citó en el expediente la privación de libertad, violación de derechos humanos y frustración de ascenso en la carrera policial.
El agente indicó en el escrito que por la denuncia falsa y calumniosa estuvo preso en las peores condiciones, con delincuentes comunes.