El resultado de la pericia del equipo de Respuesta Internacional de la Agencia de Alcohol, Tabaco y Armas de Fuego (ATF) integrado por investigadores norteamericanos, bomberos voluntarios paraguayos y policías de la provincia de Formosa, llegó a la siguiente conclusión: "El portón de metal que separaba el estacionamiento de la rampa de entrada y salida se había deslizado y cerrado y numerosas personas quedaron atrapadas en esta área a medida que el fuego se extendía hacia abajo por esta zona".

Por su parte, la Policía de Formosa refirió en otro informe que "la puerta de la rampa poseía idéntica construcción que la anterior (se refiere a la reja de Santísima Trinidad) con sistema de cierre corredizo, constituida por dos hojas móviles sin dispositivo de traba visible, se puede afirmar además que las partes móviles-hojas de este sistema se hallaban en posición de cierre".

Agrega que "esta afirmación se fundamenta debido a que las mismas no sufrieron alteraciones algunas por el accionar del incendio durante y posterior al paso del siniestro".

En tanto que la pericia realizada por expertos chilenos indica: "Por otra parte y en relación al alto número de víctimas fatales y lesionados, productos del incendio, es indudable el hecho que estas quedaron atrapadas en las vías de acceso y salida del edificio contribuyó considerablemente a la magnitud del siniestro".

Sin embargo, el informe de la Policía no determinó con claridad si las puertas estuvieron cerradas durante el incendio. Realiza una amplia explicación técnica sin arriesgar una conclusión. Solo se refiere en forma contundente a sectores que no estaban relacionados al hallazgo de víctimas al indicar que "el portón de la azotea y mirador descripta en el punto G se encontraba cerrado y llaveado en el momento de producirse el incendio".

Este informe de la Policía fue el que más interrogantes dejó a los abogados querellantes, más aun ante el conocimiento de que había reportes de extranjeros que no coincidían con el informe de las Fuerzas Públicas.

De hecho, durante la declaración del comisario Victorino Martínez se le llegó a tocar este punto e indicó que si bien trabajó con especialistas extranjeros, su informe no coincidió con el de sus colegas.

Añadió que cada perito puede llegar a una conclusión en base a su técnica y conocimiento.

Todos los informes están ofrecidos como pruebas y por lo tanto serán valorados por el Tribunal de Sentencia integrado por María Doddy Báez, Elio Ovelar y Manuel Aguirre.

Lo cierto es que la discusión sobre el cierre de las puertas es el punto clave para determinar la responsabilidad penal por homicidio doloso de Juan Pío Paiva, Víctor Daniel Paiva y Daniel Areco por la tragedia del 1 de agosto de 2004, que costó la vida a casi 400 personas y dejó a 500 heridos.

El Tribunal que juzga a los acusados está integrado por María Doddy Báez, Manuel Aguirre y Elio Ovelar. La audiencia pública continúa mañana y los miembros del tribunal centrarían su interrogatorio sobre el cierre de las puertas, ya que la falta de contundencia de los peritos genera muchas dudas al respecto.

Otro punto importante que se debe demostrar durante el juicio es si efectivamente Juan Pío Paiva dio o no la orden para que se cierren las puertas del supermercado.


ACTOS DE INVESTIGACION

- La presencia de los peritos de la Agencia de Armas, Tabaco y Fuego (ATF) de los Estados Unidos fue ofrecida como acto de investigación de la fiscalía, al igual que los peritos chilenos.

- Tanto los agentes de la ATF como los chilenos vinieron a nuestro país a colaborar con la investigación, pero no se sometieron a la justicia.

- Es seguro que la defensa objetará la inclusión de ambos informes como pruebas.

- La Policía de Formosa vino a nuestro país a colaborar, sin condicionamiento alguno, y sus representantes están participando de la diligencia con sus pares paraguayos, quienes prestaron juramento ante la jueza Blanca Gorostiaga antes de iniciar el trabajo.