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"Estamos en eso. Es una parte que no se puede dejar de chequear, por más de que ello no sea del agrado de los familiares", dijo una fuente investigativa que confirmó que efectivos de inteligencia de milicia cooperan desde ayer.
Las personas que frecuentaban a Mariángela, sus amistades, familiares, los movimientos de dinero, operaciones comerciales y cuestiones referidas a eventuales deudas son algunos de los aspectos verificados por los agentes que tratan de dar con algunos hilos que conduzcan a localizar a la ex modelo.
Dos testigos que aparecieron en la víspera señalaron que el ilícito fue llevado a cabo por dos sujetos vestidos con ropa de deporte. Esta información es manejada con pinzas.
Un empleado de limpieza de Ñu Guazú aseguró haber visto a la señora Martínez a unos 400 metros del estacionamiento, lugar donde dejó su camioneta Mercedes ML-320 para hacer "footing".
Los captores habrían contactado varias veces en la noche del martes y marcaron pautas para el curso de la negociación. El dinero exigido por los captores ascendería a más de un millón de dólares, según fuentes extraoficiales.
La fiscala Clara Ruiz Díaz insistió en más de una oportunidad que los dos identikits mencionados no podían ser suministrados a la prensa debido a que, por sobre todo, el objetivo de la investigación es rescatar con vida a Mariángela Martínez.
CAMBIO DE TITULAR
El jefe policial ha sido sustituido por el Crio. Princ. Raúl Vázquez, quien ya se desempeñaba como titular de seguridad del Palacio de Justicia.
HUBO NUEVA LLAMADA DE LOS CAPTORES
El portavoz del equipo de investigadores, Crio. Gral. Miguel Centurión, manifestó que la única novedad que hubo en la víspera fue una nueva llamada a allegados a la familia de Mariángela Martínez Houstin. Admitió que no existe mayor avance en la pesquisa que es coordinada entre policías y fiscales en el puesto de comando instalado en el Ministerio del Interior.
"El tema está avanzando, aunque a paso aún lento. No podemos adelantar mayormente ninguna información porque queremos precautelar el desarrollo de la investigación, pero efectivamente sí hubo una nueva comunicación, aunque lo conversado con los secuestradores solo es sabido por los allegados a la señora", manifestó Centurión.
El alto jefe policial confirmó que ya hubo pedido de rescate, aunque indicó desconocer el monto.
El ministro del Interior, Osvaldo Benítez, escuchó ayer a los investigadores y a un grupo de fiscales en su oficina y, según los informantes, se encontraría muy ansioso ante avance relativo de la investigación. Un grupo de fiscales también fue visto entrando y saliendo de las oficinas de esa cartera de Estado, así como también en la residencia de Mariángela Martínez.
A partir de la víspera, el hijo de la ex modelo Hugo Talavera Martínez ha tomado el control de la negociación con los secuestradores, señalaron las fuentes.
ANTECEDENTES MÁS CERCANOS
Los antecedentes más cercanos en materia de secuestros extorsivos constituyen el caso de María Edith Bordón de Debernardi, nuera del ex ministro de Hacienda Enzo Debernardi, y el fallido ataque perpetrado en perjuicio de Natalia Zuccolillo, hija del director de este diario Aldo Zuccolillo.
La Policía recordó ayer ambos casos, atendiendo a que los demás hechos ocurridos el año pasado fueron del tipo express o relámpagos, secuestros que tuvieron rápido desenlace y que derivaron en la paga de sumas no demasiado altas en comparación con el caso Debernardi, por ejemplo.
El tema Mariángela Martínez Houstin constituye probablemente un tipo de secuestro de los clásicos en materia de extorsión, de esos que implican largo lapso de negociación y con astronómico monto exigido por los captores, en este caso, más de un millón de dólares.
El caso de Natalia Zuccolillo fue recordado ayer por analistas policiales. Estos señalaron que, de haber tenido éxito aquel fallido ataque -registrado el 4 de diciembre del 2002 en Gómez Brizuela casi Julio Correa-, probablemente habría sido similar al caso de Nika Debernardi y de Mariángela Martínez.
De hecho, entonces surgieron indicios muy sólidos de que miembros de la banda que secuestró a Nika Debernardi -integrantes de la organización de extrema izquierda Patria Libre- habrían sido también responsable del ataque a Natalia Zuccolillo. La joven consiguió eludir el cerco de los secuestradores mediante una rápida y muy arriesgada maniobra en momento cuando iba al mando de su automóvil, según los antecedentes.