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La intervención es producto de un seguimiento iniciado tres meses atrás por agentes de Delitos Económicos de la Policía. Los datos recolectados durante el seguimiento fueron elevados en un informe al procurador general de la República, Nelson Mora, y este llevó la denuncia al fiscal de Turno, Francisco de Vargas Benítez, debido a que el fiscal de marcas Amílcar Ayala se encuentra fuera del país.
Una comitiva judicial policial intervino sorpresivamente las instalaciones de la imprenta a las 01:00 de ayer, precisamente en momentos en que un grupo de empleados se encontraba imprimiendo cajetillas de cigarrillos presuntamente falsificados.
Durante la intervención también se hallaron estampillas y sellos falsificados de los Ministerios de Hacienda de Brasil y Bolivia, de acuerdo con lo señalado.
La mayoría de las imitaciones requisadas corresponden a marcas de cigarrillos de Estados Unidos y Brasil. También se hallaron marcas de cigarrillos comercializados en nuestro país, Argentina, Bolivia, Perú y hasta en Haití.
Algunas de las falsificaciones tenían impresas varias marcas de venta mundial como Marlboro, Camel, Winston y L&M. Entre las de origen paraguayo están Palermo, Ritz y Boquerón, dijeron los policías.
Los policías se trasladaron luego hasta la vivienda del hijo de la dueña de la imprenta, Edgar Hilmer Koube, en Tte. Bosch casi Venezuela. En este lugar hallaron otras evidencias asociadas con el ilícito.
También fueron cateadas la casa de Julián Ortiz, ubicada en Ytororõ y la de Héctor del Pinto, en Mariano Roque Alonso. Ambos son empleados de confianza de la propietaria, y allí se encontraron más evidencias.
Las sospechas de los agentes apuntan a que las cajetillas falsificadas eran comercializadas en tabacaleras de Ciudad del Este, Hernandarias, Minga Guazú y también de San Lorenzo. Luego eran llevadas hacia Brasil, Perú, Bolivia y otros mercados, de acuerdo con lo referido.