Los estudiantes implicados en esta nueva riña cursarían el primer curso de la media, turnos mañana y tarde. El menor que fue víctima pudo individualizar a nueve personas, M.A., S.R., V.M., C.S., R.D., F.C., N.R., S.V. y A.N., y otros cuyos datos se corroborarán con el correr de las investigaciones. La edad de estos oscila entre 15 y 17 años.

Según el escrito presentado, el 9 de junio en horas de la madrugada el adolescente fue víctima de una patota a la salida de un acontecimiento social realizado en el club Centenario. El relato dice que fue interceptado sobre la calle Venezuela –cuando se dirigía a su casa– “por un grupo de jóvenes quienes formaron ronda a su alrededor y empezaron a golpearle, le tiraron al suelo y allí siguieron dándole patadas por todo el cuerpo, siendo luego auxiliado por sus compañeros de colegio, quienes fueron testigos presenciales del hecho”.

El padre del menor, al percatarse del estado de su hijo, le llevó a Emergencias Médicas y luego le internó en un sanatorio privado.

Según el reporte médico de la doctora Marylene Cabañas, el chico ingresó con náuseas y cefalea intensa y presentaba “múltiples escoriaciones en el lado derecho e izquierdo de la región escapular, en región supraciliar y zona 2 del cuello lado derecho, en la cabeza tumefacción en región occipital de 5 cm de longitud y equimosis palpebral”.

De un tiempo a esta parte se hizo costumbre que alumnos del colegio San José se vean involucrados en peleas callejeras.