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Podría suponer que su apresuramiento esté vinculado con cierto grado de compromiso con Fernando Lugo por gestiones ante el gobierno de Chávez. Como sea, a los efectos de este artículo su posición refleja pura desinformación y susceptibilidad a la propaganda.
Es probable que la mayoría de los países que dudan sobre la legitimidad del juicio político que destituye a Fernando Lugo tengan estos componentes. Por eso, en poco tiempo, cuando se pase de la propaganda a la información, todos reconocerán el escenario; se normalizarán las relaciones y solo quedarán con medidas sancionatorias aquellos gobiernos comprometidos con el proyecto de instalación y consolidación del Socialismo del Siglo XXI en nuestro país.
El presidente Santos parece no saber dos cosas fundamentales: 1) En el Paraguay triunfó la democracia constitucional y todas sus instituciones funcionan normalmente, y 2) Es tan fuerte nuestra vocación, en estas circunstancias, que nadie aceptaría incumplir la Constitución para satisfacer la demanda de los gobiernos extranjeros.
En el Paraguay no se pueden anticipar las elecciones, las fechas están establecidas en la Constitución.
Hay un rango de tiempo que da un margen de apenas 30 días; no hacer las elecciones en ese rango sí que seria “crisis” por violar la Constitución.
La propuesta es típica para recuperar la democracia. Lo que pasa es que aquí nunca la perdimos; por el contrario, la garantizamos al alejar del poder a su peor amenaza, el Socialismo del Siglo XXI.
Copio los artículos constitucionales: Artículo 229 - DE LA DURACIÓN DEL MANDATO
El Presidente de la República y el Vicepresidente durarán cinco años improrrogables en el ejercicio de sus funciones, a contar desde el quince de agosto siguiente a las elecciones (…).
Artículo 230 - DE LAS ELECCIONES PRESIDENCIALES
El Presidente de la República y el Vicepresidente serán elegidos conjunta y directamente por el pueblo, por mayoría simple de votos, en comicios generales que se realizarán entre noventa y ciento veinte días antes de expirar el período constitucional vigente.
Es decir, si la intención fuera “normalizar” la vida institucional, en el supuesto negado de que esté roto desde el juicio político, entregando el poder a alguien electo, no sería posible hasta el 15 de agosto del 2013.
Siendo así, la inexistente ruptura del orden constitucional con el juicio político tendría una flagrante violación del orden constitucional con la propuesta del presidente Santos iniciando el proceso electoral al margen de lo dispuesto en la Constitución.
Cuando de la propaganda se pase a la información, tengo pocas dudas, los presidentes sabrán que la única crisis que existe es en el castro-chavismo porque su proyecto continental está herido de muerte en el Paraguay.
Gq.06.10@hotmail.com