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Teniendo todas las informaciones, con la ayuda de los profesionales, podemos obtener una mejor calidad de vida. Incluso, algunos médicos hablan de pacientes que se curaron “milagrosamente” de cáncer o afecciones cardiacas muy graves, cambiando de mentalidad y viendo su enfermedad, no como una sentencia de muerte, sino una oportunidad de comenzar todo de nuevo y de modo diferente.
Las motivaciones para curarse y liberarse del miedo y la angustia deben provenir del interior de uno mismo, para ayudarle al cerebro a segregar las sustancias químicas que producen alegría, esperanza y paz. La ciencia cada día registra casos de hombres y mujeres que, al enterarse y asimilar sus enfermedades, deciden vivir plenamente y esa pasión por vivir se convierte en la mejor medicina. Claro está que estos pacientes siguen al pie de la letra las indicaciones médicas.
Por suerte, esas personas toman como un don, una bendición, la enfermedad que padecen. Esta circunstancia les sirve para revalorizar la vida, seguir con proyectos, metas e ilusiones; les acerca a la familia, pudiendo establecerse una mejor y más rica comunicación con los seres queridos. Ellos adquieren, a partir de esto, un nuevo concepto de la importancia de vivir y gozar de cada minuto como algo único, intenso e irrepetible. Muchos comienzan a relacionarse profundamente con Dios, poniendo todo en sus manos y creciendo en la fe. El ser humano es cuerpo, mente y espíritu. Para una perfecta armonía, las tres entidades deben estar en equilibrio.
Los naturistas recomiendan el contacto con la naturaleza. Se han visto casos de enfermos que se curaron por el amor que tienen a las flores. Nadie puede negar, que estar dentro de un jardín, aspirar el aroma de las plantas, tocar las hojas o tirarse en el pasto, dan una sensación de paz y bienestar general, aparte de recargar las pilas con renovada vitalidad. Existen muchas terapias con flores y aromas, para tratar diversas dolencias físicas y emocionales. De hecho, el poder curativo de las plantas es increíble. El sol también es un aliado. Son famosos los baños de sol como terapia curativa. En la Grecia Antigua, se les sacaba a los enfermos en las plazas, para que tomen sol y puedan aliviarse. ¿Qué hace un perro cuando se siente mal? Come pasto, vomita y se tira al sol. Entonces, chau malestar. Así, también en nuestras vidas, el astro rey incide en la salud.
Realizar caminatas regularmente y comer sano, preferentemente frutas, verduras, semillas, raíces y hojas verdes, son condiciones básicas. Evitar el alcohol, el tabaco, el café, las gaseosas, la carne, la harina, el arroz y el pan que no sean integrales, también es primordial. Los estudiosos de la nutrición, hoy por hoy, dan la lista de los alimentos que limpian el cuerpo de toxinas y colaboran que la calidad de la sangre que irriga el cerebro sea de mejor calidad. Incluso, dan a conocer una tabla de los alimentos con aminoácidos que producen triptófano, a partir del cual se elabora la serotonina, la sustancia química de la salud, la alegría y la felicidad.
Finalmente, todas las cosas buenas que hacemos, como cuidar el cuerpo, la mente y el espíritu, nos producen emociones positivas. No hay que olvidar que el cuerpo es el templo del espíritu. Para albergarlo hay que mantenerlo limpio y ordenado. No agredir ese maravilloso laboratorio que el Creador nos ha regalado para llevar una existencia larga, sana y dichosa. El poder curativo de las emociones positivas es increíble y depende de nuestra voluntad, descubrirlo y desarrollarlo al máximo para obtener un bienestar completo.
blila.gayoso@hotmail.com