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Las utilidades de capital se pagan al Brasil de una sola vez. Al Paraguay, se divide en 12 cuotas para aplicar al pago de un préstamo. El que recibe al contado, recibe financieramente un beneficio mayor. Paraguay pierde el costo de oportunidad de ese capital. Esta situación se repite con el factor de ajuste, que no tiene un préstamo adjunto.
El cálculo del factor de ajuste se realiza a los 14 meses, en promedio, cuando se conocen los índices acumulados finales de la inflación americana del ejercicio anterior, y se paga al Paraguay en 12 cuotas mensuales iguales, sin intereses. Cabe señalar que en caso de demoras, la ANDE paga a Itaipú una tasa de interés de 1% mensual equivalente a 12,68% anual. Esta misma tasa se podría aplicar a los retrasos en la recepción de ingresos del Paraguay.
La postergación de la recepción de los beneficios establecidos en el Anexo C y sin compensación financiera por el pago a plazos es una situación de pérdida financiera para el Paraguay.
A manera de ejemplo del impacto financiero de este procedimiento, en el año 2011 los beneficios por el factor de ajuste fueron de US$ 170 mm, aprox. En lugar de recibir de una sola vez esa suma, la misma se dividió en 12 cuotas, Itaipú contaba con disponibilidades en efectivo para pagar al Paraguay esa suma. Cualquier comerciante o financista incluyendo al almacenero conoce la diferencia entre cobrar al contado y cobrar en cuotas. Para Itaipú, tratándose del Paraguay es lo mismo pagar al contado que a crédito. Si bien el flujo de fondos permanece en la cuenta de la IB y es colocada en el mercado brasileño donde recibe una compensación, la ganancia corresponde a ambos países por partes iguales. El Brasil se beneficia injustamente de un procedimiento, que es claramente no equitativo.
La aplicación de medidas financieras que IB adoptó en momentos de baja disponibilidad de efectivo, y que no fueron revertidas al tiempo de regularizarse la situación del flujo de caja del ente demuestra una aplicación sesgada del principio de isonomía.. Los fondos depositados en el sistema financiero brasileño, contribuyeron al apalancamiento de sus instituciones públicas y por ende, al crecimiento de la economía brasileña.
El Paraguay debería reclamar el cobro al contado desde este año del factor de ajuste y al mismo tiempo, iniciar el pedido de resarcimiento por el financiamiento otorgado a la IB por este concepto, que sumarían cientos de millones de dólares.