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“Las FARC iniciaron en Colombia igual como están ustedes: primero fueron pequeños ataques a poblaciones y comisarías. Siguieron con secuestros, luego con células de adoctrinamiento, pasaron a reclutamientos de menores, ingresaron al negocio del narcotráfico y luego iniciaron ataques terroristas con bombas en las principales ciudades”.
El poder en lo urbano
“Si no los paran, van a pasar al área urbana porque allí está el poder”, agrega el alto jefe policial.
Para Barrera se percibe desde afuera un escalamiento de la delincuencia del grupo armado. “¿Qué hacían las FARC en los años 60? Iban a hostigar a poblaciones pequeñas donde tenían 4 o 5 policías, ellos iban entre 15 o 30, hostigaban, mataban y robaban armamento para poder fortalecerse. Empezaron con el secuestro porque así consiguieron sus primeros ingresos. Luego mutaron al narcotráfico. La FARC llegó a tener 15.000 hombres y ahora están debilitados porque el Estado se fortaleció para combatirlos.
–¿Cuál fue el camino de la violencia?
–Empezaron atacando pequeñas poblaciones en sectores rurales, en comisarías con 4 o 5 policías. Después hicieron secuestros de tipo extorsivos; en el área rural implementaron una célula de doctrina marxista y luego empezaron a reclutar gente y niños entre los campesinos. Empezaron a volar puentes, torres de energía, atentados contra infraestructura estatal.
Los campesinos pensaban: “Un momento, sí, estamos aquí tirados al abandono, ellos son los Robin Hood”. Después ya vino el negocio del narcotráfico, ya comenzaron a poner bombas y atentar contra todo el Estado en sí. Los ministerios, la fuerza pública, secuestraron senadores, congresistas.
Barrera recuerda que a finales de los 90, las FARC ingresaron a las ciudades. Y vuelve a insistir: “Van a pasar del área rural a la urbana porque el poder está en el área urbana. Pero se puede atacar a tiempo con una muy buena inteligencia, buenas investigaciones, una muy buena cooperación internacional, una muy buena policía judicial, una fiscalía fortalecida y la justicia es clave. Es necesario tener a la Policía y a la Fiscalía creciendo juntos, al mismo ritmo, porque el ciudadano necesita que exista justicia”.