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El magistrado lleva adelante la causa que tiene que ver con la documentación falsa que logró obtener el prófugo argentino durante el tiempo que vivió en Paraguay.
Lo que declaró Gladys se mantiene en reserva porque ella es considerada una testigo protegida y sus dichos se mantienen en el marco de la privacidad, aclaró el juez Delgado.
La fiscala Sandra Quiñónez, que lleva adelante la investigación de la venta de documentos de identidad paraguayos al ciudadano argentino, solicitó la diligencia en carácter de anticipo jurisdiccional de prueba y pidió que el testimonio no trascienda, por lo que tuvo que ser llevado por el magistrado de la causa de forma hermética.
La mujer, que tiene dos hijos con Pérez Corradi, se presentó ayer con el abogado Carlos Rodríguez Brum y se trasladará a Argentina junto a su pareja extraditada esta semana.
Delgado había prestado declaración testifical en sede del Ministerio Público y relató que policías de la Interpol le pidieron a su pareja US$ 100.000 para no detenerlo y US$ 20.000 para facilitarle cédula de identidad paraguaya y pasaporte, lo que finalmente consiguió y le permitió ocultarse por años en nuestro país.
Si bien Pérez Corradi logró un procedimiento abreviado y ser extraditado a su país de forma voluntaria, el caso continúa para los policías David Nicolás Benítez Meza y Luis González González, procesados por proporcionar la cédula de identidad y el pasaporte paraguayos adulterados.