Implacable temporal causó la muerte de un bebé y un adolescente

El fuerte temporal que azotó gran parte del departamento Central durante la madrugada de ayer dejó dos muertos, una serie de calles destruidas y al menos 31 árboles caídos. Hubo momentos de desesperación y, para hoy, se esperan más precipitaciones.

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El temporal tuvo su inicio ayer a las 4:45 y se extendió hasta cerca de las 7:00. Según reportes de la Dirección Nacional de Meteorología, el epicentro de la tormenta se dio entre las 5:00 y las 5:45, lapso en el que se registraron vientos de hasta 100 kilómetros por hora y 85 milímetros de agua caída.

Según los reportes, las lluvias continuarán en la madrugada de hoy.

Dos fallecidos

El temporal dejó dos muertos a su paso. Uno de los casos se registró en la zona conocida como 3 de Mayo, camino al club Mbiguá, Bañado Norte de Asunción, donde la víctima fue Matías Samuel Báez Bogado (14), hijo de María Estelvina Báez Bogado.

El menor falleció prácticamente aplastado bajo los escombros de una muralla que cayó sobre la precaria vivienda que habitaba con su madre. Los esfuerzos realizados por los vecinos para rescatar con vida al adolescente fueron inútiles y tanto la Policía como los bomberos tardaron en llegar, ya que la zona es de difícil acceso.

El otro caso es el de un menor de apenas dos meses de vida, identificado como Fidel Tobías Almirón, hijo de Deisy Dasu (23), que falleció ahogado en el asentamiento El Mangal de Toledo Cañada, Capiatá, al ser arrastrado por las aguas de un arroyo que se desbordó a causa de la copiosa lluvia.

Poco después de las 5:00, los fuertes vientos que acompañaron la lluvia destecharon la humilde casa donde Deisy habitaba junto a sus tres hijos, a orillas del arroyo Capiatá. Presa del pánico, la mujer alzó en brazos a las criaturas y corrió en busca un refugio, pero se resbaló y al tratar de equilibrarse el bebé se le escapó de las manos. En medio de la oscuridad, el chiquito fue arrastrado por las aguas del arroyo. El cuerpo fue hallado cuatro horas después, a 500 metros del lugar.

Calles destruidas

Varias calles de Asunción quedaron completamente inutilizadas por los raudales que con fuerza arrastraron la capa asfáltica, el empedrado y parte de la tierra, dejando gigantescos baches que ocasionaron accidentes. Con la tormenta quedó en evidencia que los asfaltados que se realizaron en los últimos cuatro meses de la administración de Arnaldo Samaniego no cuentan con un sistema de desagüe pluvial, por lo que las aguas avanzan con mayor fuerza por estas arterias.

Los mayores destrozos se vieron en Guido Spano y Reclus, recientemente asfaltada, además de las inmediaciones de la Municipalidad de Lambaré donde el desborde del arroyo que lleva el nombre de la ciudad arrastró parte de una vivienda, la vereda y se desbordó hasta cubrir un sector de la avenida Luis María Argaña.

La Municipalidad de Asunción contabilizó 31 árboles caídos en distintas calles, que causaron inconvenientes en el tránsito. Funcionarios de la Dirección de Servicios Urbanos retiraron las ramas y troncos.

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