La alegría de los jóvenes
Agrupaciones juveniles de todo el país y del extranjero llegaron ayer hasta Ñu Guasu para el encuentro con el Santo Padre, entre ellos 780 jóvenes de la parroquia Inmaculada Concepción de Caaguazú, que desde el jueves estuvieron cumpliendo la función de cordón humano en lugares donde el papa Francisco pasaba. “La experiencia fue única, cada momento fue especial”, dijo José González, uno de los jóvenes servidores. Bruno Padován, otro representante de un grupo juvenil, contó emocionado que llegaron al lugar del evento a las 4:00 para ayudar a los peregrinos.
