Familiares de pacientes en terapia de IPS compran insumos casi a diario

Guantes para procedimiento y tiras para medir la glucemia son adquiridos sistemáticamente por familiares de pacientes internados en la Unidad de Terapia Intensiva de Adultos del Hospital Central del Instituto de Previsión Social. Esto lo afirman desde el albergue ubicado prácticamente detrás del nosocomio. Las altas autoridades de la previsional planifican cómo despilfarrar y manosear el dinero de trabajadores y empleadores.

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Si bien son insumos menores, hay familiares que ni siquiera tienen dinero para comprar todos los días guantes y otros elementos de los que el IPS no dispone desde hace mucho tiempo.

Secundina Vera, de 75 años de edad, es una paciente internada ya desde hace dos meses, por complicaciones de su diabetes. Ella es viuda de un jubilado y su familiar denunció que no puede percibir los haberes de su marido porque está inconsciente y tampoco le permiten sellar con sus huellas dactilares el documento para efectivizar su dinero congelado hace dos meses.

Rosa es familiar de la citada paciente y nos mostró la boleta de una farmacia de donde compró una caja de cien unidades de guantes medianos a un precio de G. 30.000; además un frasco de Codefree (tiras para medir la glucemia) que cuesta G. 49.873. “Esto nos piden casi cada dos días, no solo a mí, sino a todos los familiares que tienen a sus pacientes en terapia; es poca cosa, pero ya hace dos meses que estamos y a nosotros nos cuesta mucho dinero. Se supone que ya no deberíamos gastar por el seguro social”, se lamentó la mujer.

Los responsables de la unidad de terapia mencionaron que cada tres días el IPS gasta por paciente internado, de 3 a 4 millones de guaraníes. De acuerdo a la patología, luego el gasto baja a 2 millones por día, sin contar con estudios complejos como tomografía, endoscopia y resonancia magnética. En el caso de los internados en terapia de neonatología, el gasto es de 5 millones de guaraníes por día.

Estos gastos en los que incurre el IPS no son una excusa válida para que los asegurados y familiares que luego deben comprar todos los días de sus bolsillos, insumos y medicamentos que debe tener en stock el hospital.

“Acá ellos no te perdonan si es que la empresa o el empleador se atrasa un mes y no te atienden, aunque sea un paciente grave”, se quejó otro familiar, que prefirió no identificarse.

Casi todos los servicios del hospital sufren la falta de insumos elementales.

En el Servicio de Urología se da el caso de que las propias enfermeras pagan de su bolsillos algunas sondas y guantes para pacientes que no tienen condiciones de comprar, según comentaron algunas de ellas.

La Contraloría de la República y la Superintendencia de Salud deberían intervenir el Hospital Central.

darce@abc.com.py cpereira@abc.com.py

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