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Ahora se los ve nuevamente pasando todo tipo de carencias. Esto se evidencia justo frente al Instituto Paraguayo del Indígena (Indi), donde un grupo de ellos pasa frío y hambre.
Representantes de diferentes etnias bailaron, cantaron y mostraron ante el papa Francisco y el mundo que el Paraguay posee una diversidad cultural que tiene su punta de lanza en el idioma guaraní como lengua oficial. A pesar de que su valor cultural se aprovecha en estas ocasiones, la realidad que le toca vivir a la mayoría de los 100.000 nativos es la marginación y la de las múltiples necesidades. El Gobierno nacional no tiene voluntad política para sacarlos de la miseria.
“Pedimos la compra de 33 hectáreas de tierras donde vivimos hace un año en el Distrito RI 3 Corrales de Caaguazú. Las mismas fueron invadidas por los campesinos, por eso no se puede comprar”, informó Tranquilino Martínez, de la comunidad 18 de Julio, donde viven 18 familias. Martínez y otras personas están hace una semana apostados frente al Indi.
Dijo que necesitan víveres y chapas y contar con la asistencia de salud. Para su comunidad necesitan educación, viviendas dignas, herramientas y semillas.
“Sabemos que molestamos a la ciudadanía, pero las autoridades no llegan hasta nosotros para darnos asistencia. Nos utilizan cada vez que pueden y luego se olvidan de nosotros”, dijo Martínez.
Sergio Benítez (33) de la comunidad Ypachi, de Caaguazú, donde viven 22 familias, nos dijo que hace 15 días están bajo carpas de plástico, pasando hambre, frío y todo tipo de necesidades. Reclaman la titulación de sus tierras. “Sufrimos mucho cada vez que venimos a Asunción, pero las autoridades se desentienden de nosotros y nos obligan a venir hasta Asunción para hacer nuestros reclamos”, indicó. Añadió que necesitan ropas, colchón, frazadas, semillas, escuela, puesto de salud y víveres.
“En nuestra tierra sembramos para el sustento mandioca y poroto. Queremos ir a nuestra comunidad y que el Gobierno se ocupe de nuestras necesidades y que no solamente se acuerde de nosotros en épocas de elecciones”, dijo Benítez.
También hay frente al Indi nativos de la comunidad Mboicua, del distrito General Aquino, departamento de San Pedro que aglutina a 35 familias. Reclaman 600 hectáreas de tierras.
“Los grupos de familias desmembradas de sus comunidades son una problemática acuciante y compleja que el Gobierno nacional debe afrontar con el Indi. No son caciques reconocidos los grupos familiares que están apostados frente a la institución. Son nativos que no reconocen la autoridad legalmente constituida en sus comunidades. Cada mes vienen a pedir víveres y traen a sus hijos a mendigar monedas en los semáforos”, precisó el presidente del Indi Jorge Servín. Agregó que siete comunidades de Caaguazú, incluida RI3 Corrales, fueron asistidos con 4.541 kits de alimentos no perecederos.
Cuatro distritos de San Pedro recibieron 2.394 kits y cuatro distritos de Canindeyú, 3.328 kits.