Cargando...
Un mendigo vive en el lugar y deja cartones y trozos de tela, madera y goma espuma. Asimismo, sus orines producen un olor nauseabundo. Aparece por las tardes y se queda a dormir a la noche, generalmente alcoholizado. Según los comerciales se comporta con violencia hacia las personas que pasan por el sitio.
A este desastre se suman tablas de madera con clavos y bolsas de residuos que fueron abandonadas presuntamente por vecinos. En medio de toda esta basura siempre se encuentran los vendedores de frutas sentados en el suelo.
Según el artículo 60 de la Ordenanza municipal Nº 217/12, los propietarios o responsables de inmuebles urbanos, cualquiera sea la situación de sus calles, están obligados a construir, reparar, conservar y/o regularizar las existentes veredas. La transgresión a este artículo es considerada una falta gravísima, que puede ser multada con hasta 20 jornales mínimos, es decir, G. 1.403.120.
La Comuna debe notificar a los dueños y exigir una pronta reparación. De no tener respuesta, la Municipalidad tiene la facultad de realizar el arreglo y pasar la cuenta a los responsables, según la Dirección de Planificación Urbana.
Funcionarios de la Municipalidad ya procedieron a la limpieza del sitio la semana pasada, por lo que hay menos basura que la habitual. Sin embargo, los escombros y el mal olor continúan.