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Habitantes apostados sobre las calles Tarumá entre Cacique Tavapy y Alto Paraná, del barrio Nazareth de nuestra ciudad, exigen que la Comuna capitalina desaloje la Plaza Defensores del Chaco, que actualmente está ocupada por un grupo importante de indígenas y microtraficantes que acampan en el sitio, según contó ayer de mañana el concejal municipal Elvio Segovia, quien llegó hasta el barrio y señaló los problemas denunciados por los pobladores. También trató de dialogar con el líder de los indígenas, pero los demás dijeron que no se encontraba y no dieron nombre.
“El año pasado nomás se invirtieron cerca de G. 1.000 millones en el enrejado de esta plaza. Luego, de manera arbitraria, el comisario Mario Agustín Sapriza retiró el policía municipal que custodiaba esta plaza, porque supuestamente el agente debía prestar sus servicios en la Terminal de Ómnibus”, contó. Criticó la acción de la Intendencia Municipal al invertir tanto dinero en un sitio de recreación, para luego abandonarlo y que se convierta en “zona liberada”.
En la plaza hay un grupo de aborígenes que viven bajo una carpa, lavan sus ropas bajo las canillas, prenden fuego y cocinan, además de generar gran cantidad de desechos en el sitio.
El edil señaló el sitio donde se instalan los microtraficantes, dentro del área de recreación, cuya lumínica -según dijo- es manejada por los “intrusos” a su antojo, pues suben o bajan las llaves de paso de la energía eléctrica cuando así lo desean.
Segovia señaló que ya presentó una minuta en la Junta Municipal, exponiendo la situación y solicitando la restitución del guardia municipal.
Por otro lado, dijo que recibió la promesa del Indi de que sacarían a los indígenas de ese lugar. También apuntó que pidió la intervención del Departamento Antinarcóticos de la Policía Nacional, pero que no obtuvo respuesta aún.