22 de marzo de 2005 - 09:03
Un proyecto de cuando Pilar casi fue borrada del mapa
Este artículo tiene 20 años de antigüedad PILAR (Enviado especial). Tras la crecida de 1983 con la que casi desapareció del mapa la ciudad de Pilar y parte del Ñeembucú quedó anegada, el nivel del agua nunca volvió a bajar lo suficientemente. Esta situación obligó a los productores a plantear un plan de manejo ambiental que fue financiado por la Agencia de Cooperación Internacional de Japón (JICA) y que cambió la vida de los pobladores.