Tres "Rosas" nacieron en el sanatorio Santa Clara

En excelente estado de salud y con el rostro rozagante se encuentran las trillizas que nacieron el miércoles en el sanatorio Santa Clara, que son hijas de Rossana Rotela de Molas y Mauro Gabriel Molas Torres, quienes se encuentran felices en la habitación 703, del séptimo piso, del mencionado centro hospitalario, y hermosos ramos de flores y peluches de tres hermosas bebés: Rosa Isabel, Rosa Gabriela y Rosa Sofía, dan la bienvenida a familiares y amigos.

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El médico tratante de la orgullosa mamá es el doctor Mario Villalba Mangiaterra, especialista en fecundación asistida, quien estuvo acompañado durante el parto por el pediatra doctor Ursino Barrios, la anestesista María Fe Ferreira, la neonatóloga doctora Marta Bareiro, dos ayudantes, una transfusionista y un hemoterapeuta.

Rossana y Mauro son jóvenes primeros padres de las hermosas trillizas, que se llaman Rosa Isabel, Rosa Gabriela y Rosa Sofía, quienes vinieron en bolsas diferentes y anticiparon la llegada de la primavera. La primera niña llegó a las 12:55, con 2,450 kilos; la segunda, a las 12:57, con 2,50 kilos, y la tercera, a las 12:59, con 2,400 kilos.

Los doctores informaron que se programó una cesárea encarada por el citado equipo quirúrgico y médico; además, durante la atención no ocurrió ninguna complicación, luego de nacidas la segunda y tercera bebés tuvieron una pequeña dificultad respiratoria y por ello necesitaron estar en incubadora por 24 horas, hasta ayer.

El embarazo se logró mediante una fertilización asistida, a cargo del doctor Mario Villalba Mangiaterra. La salud de la madre es inmejorable y todo transcurre con normalidad, hecho que augura un bello futuro para las pequeñas.

El hecho novedoso es que se trata de trillizas -tres niñas- nacidas en bolsas distintas y podrían presentar sólo alguna mínima diferencia de rasgos, recordándonos a las famosas "Trillizas de Oro" de la Argentina.

Llegaron a las 32 semanas y media, faltando sólo una semana y media para considerarse de término. Así, en el día de la cesárea, la madre llevaba a sus bebas con un peso total de 7 kilos en la panza. Se trató de un buen embarazo, no tuvo mayores problemas, estuvo siempre bien controlado por el doctor Villalba, de mucha experiencia, al igual que el doctor Ursino Barrios.
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