Entre los que llamamos niños de la calle existen varias tipologías. Están los que vienen de la periferia de Asunción a trabajar en zonas específicas de la ciudad y por la noche vuelven a sus casas, donde tienen una familia constituida a la que llevan el sustento. Otros vienen de ciudades dormitorios, se quedan una semana en la capital y vuelven los fines de semana a sus casas con la platita recolectada.

Cualquiera de estos sea el caso, se produjo un cambio de roles en la familia. Los niños salen a traer el sustento y los padres se sientan a esperar. Algunos los acompañan y miran desde la vereda mientras toman tereré y otros están por las casas o el barrio.

"Ese es uno de los núcleos sobre el cual hay que trabajar en concientización. Si ese niño puede sostener a su familia vendiendo chicle, entonces el padre no puede decir: yo no tengo trabajo y por eso no puedo... También él puede vender chicle para sostener a su familia", asegura la doctora María Teresa Sánchez de Martínez.
Sobre este punto -se explaya- hay cosas sencillas que se pueden gerenciar y la ciudadanía también tiene que tomar conciencia de su realidad y asumir el rol de padre. "No podemos seguir trayendo hijos al mundo esperando que los demás nos los críen. Todo pasa por la educación y la concienciación, una paternidad responsable, una educación sexual correcta y que la planificación familiar sea una realidad", sostiene.


DESARRAIGADOS

Pero en la gama de niños trabajadores de la calle también hay menores totalmente abandonados que están en situación permanente de calle, que no tienen una familia nuclear que los acoja. "Estos son los niños totalmente desarraigados, totalmente expuestos pero también su número varía porque migran constantemente", afirma.

De acuerdo con el último cálculo realizado por la SNNA se estima que en Asunción hay por lo menos 300 niños que están durmiendo en las calles y cuya situación es la más crítica.


SIGUE REGISTRO DE ONGS

Ante la alarmante proliferación de niños en las calles de Asunción la Secretaría Nacional de la Niñez y la Adolescencia convocó a través de los medios de comunicación a las distintas organizaciones que trabajan el tema de la infancia para que se registren en el ministerio durante todo el mes de mayo y así coordinar las tareas.

Sin embargo, solo se han presentado unas 38 a 40 organizaciones entre ONGs y fundaciones de las aproximadamente 500 que existen en todo el país. Por esta razón las inscripciones continuarán.

El objetivo del registro no es controlar los fondos que reciban estas instituciones, sino intentar coordinar las acciones y evitar la superposición de actividades, explica la Dra. Sánchez de Martínez.

Sencillamente la SNNA quiere asumir el rol de ente rector de las políticas de niñez para acabar con la desorganización de las instituciones que "sin fines de lucro" captan fondos del exterior para trabajar por la infancia.