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El problema de Asunción y del departamento Central es la falta de alcantarillado sanitario. Por ello, se recurre a los pozos ciegos.
Pululan las “empresas” que ofrecen servicio de desagote de pozos ciegos que se llenan. Las ofertas más baratas son de las que ni siquiera figuran en la Seam, cuyo destino de la carga de sus cisternas son las redes de la Essap, arroyos o ríos.
Hay empresas que fueron varias veces intervenidas y que sin importar el impacto ambiental, y con apoyo de “padrinos”, siguen funcionando, debido a la debilidad de las instituciones.
Un caso es de la empresa Desagües del Paraguay (Desapar), de Dionisio Amarilla Caballero, que está en Costa Azul, Limpio, cercanías de la desembocadura del arroyo Itay al riacho San Francisco.
La Seam había anulado la licencia ambiental a Desapar, en el 2012, por contaminar y no adecuarse a las normas, pero en noviembre del mismo año el juez Rubén Gustavo Ayala Brun anuló la medida de la institución ambientalista.
Desapar trabaja en sociedad con la firma Empresa de Desagüe Sanitario (Emdesa), que también fue intervenida por descarga indebida en la red de Essap.
Dueños de efluentes
En la Seam informaron que los propietarios de pozos ciegos, sean domiciliarios o de locales comerciales y empresas, deben exigir y conocer el destino final de sus efluentes, porque tanto el que transporta, el que hace el tratamiento y el mandante del servicio (dueño de casa, empresa, etc.), son responsables y pasibles de sanciones administrativas y judiciales.
En el caso de la firma Tayi Ambiental y Sermat SA, todas las empresas de las que retiran efluentes son pasibles de sanciones, debido a que la Seam no otorgó licencia ambiental para el tratamiento de efluentes a terceros.
Ante la Seam llegó justamente la información de que un cisterna de Tayi Ambiental salía del local de Cartones Yaguareté, Luque, cuyo efluente es industrial.
Llamamos ayer a Cartones Yaguareté, sobre el caso, y la secretaría Raquel Palma dijo que se comunicaría con el diario el responsable de gestión industrial, Carlos Argaña, pero no lo hizo.