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El citado funcionario señaló días atrás, en conferencia de prensa, que se abrieron tres vías de investigación. La primera es el estudio laboratorial de los anestésicos bupivacaína (de la marca Buloc C, del laboratorio indio Celón) y fentanilo (del laboratorio Eurotec), ambos puestos en cuarentena. La segunda vía es por la Junta Médica, conformada para el efecto y que deberá entregar un informe en tres semanas. La tercera es la Fiscalía, que ya ordenó la autopsia de Ignacia Cafasu, cuyo resultado se conocerá a mediados de este mes. La mujer falleció el pasado 17 de agosto, luego de tener una reacción adversa minutos después de recibir los anestésicos mencionados en el Hospital Central, donde se iba a someter a una cirugía en el Servicio de Traumatología. El segundo afectado, Bryan Gutiérrez (24), también tuvo una reacción adversa al recibir ambas drogas antes de ser operado en Traumatología del Hospital Central el 20 de agosto. El joven comenzó a tener espasmos y tuvo que ingresar a terapia intensiva por varios días. Actualmente está fuera de peligro.
Médicos de la previsional, que pidieron la reserva de sus nombres, indicaron que es muy extraño que se usen dos anestésicos a la vez, por lo que es justificado que la Junta Médica investigue esta situación, que pudo influir en las reacciones adversas de los pacientes. Por su parte, los anestesistas del IPS, con el apoyo del Círculo Paraguayo de Anestesistas, señalan que los productos usados en los casos mencionados son de mala calidad.