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La crisis ya trascendió las fronteras paraguayas y las grandes logias de Sudamérica han comenzado a interesarse del caso y a pronunciarse. La Confederación Masónica Internacional ha recibido informes de la situación, ya que se considera grave el hecho de que se haya recurrido a la justicia "profana". Para los masones cualquier problema que surja se debe resolver dentro de la organización, que cuenta con sus propios reglamentos y códigos.
Según el gran maestro de la Gran Logia, César Adorno, el trasfondo del conflicto sería político, aunque los reglamentos internos de la masonería impiden que la masonería se involucre en cuestiones de política y de religión. "Vamos a seguir la cuestión judicial, aunque no reconocemos a la justicia electoral como masones. Vamos a acatar a la justicia, y a las autoridades y las leyes. Reconocemos eso, pero no a la justicia electoral. ¿Cómo un juez electoral va a firmar un allanamiento? Eso solo en Paraguay sucede", exclamó Adorno.
De acuerdo a la justicia electoral, Ysabelino Nemesio Lichi es ahora el gran maestre serenísimo de la Logia Gran Oriente del Paraguay. Según una resolución del Tribunal Superior de Justicia Electoral, del 14 de este mes, firmada por Alberto Ramírez Zambonini, Juan Manuel Morales y Rafael Dendia, no se hace lugar a los recursos de nulidad y apelación interpuestos contra la resolución Nº 234 dictada por el Tribunal Electoral de la Capital. Esta resolución dispone la suspensión en el ejercicio del cargo de la gran maestría de la Gran Logia Simbólica del Paraguay a Reinaldo Domínguez Dibb.
Pero un sector no le da validez a esta decisión, porque en las elecciones, donde deben votar 129 representantes, Lichi no alcanzaría los votos necesarios, que equivalen a dos tercios de los votantes. En cuatro elecciones sucesivas, ninguno de los sectores obtuvo esa cantidad de votos, aunque Domínguez Dibb fue el que más se aproximó.
La resolución de la Justicia Electoral se produce durante un cuarto intermedio del proceso eleccionario.