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La Reforma Religiosa Protestante se originó en Alemania, en 1517, cuando Martín Lutero publicó las “95 tesis” contra la venta de indulgencias, en la puerta de la iglesia de Wittenberg.
El movimiento tuvo como objetivo provocar un cambio profundo y generalizado en los usos y costumbres de la Iglesia católica, además de negar la jurisdicción papal sobre toda la cristiandad.
Según el “Bosquejo Histórico del Cristianismo Evangélico en el Paraguay”, del Dr. Flavio Florentín, en la Época Colonial (1537-1811) ya se habla de la presencia protestante en nuestro país... “La férrea oposición de las autoridades coloniales y del Tribunal del Santo Oficio, anularon la presencia protestante, salvo dos llamativos casos ocurridos a temprana hora en la Colonia (Paraguay)”, señala en su libro.
En la expedición de Don Pedro de Mendoza se embarcó como soldado y arcabucero el germano Ulrico Schmidl. Originario de Straubing, Baviera. Por consejo de su familia se alejó de las disputas religiosas de su época y se embarcó en la expedición al Río de la Plata. Luego de participar de la primera fundación de Buenos Aires, siguió camino bajo la dirección de Juan de Ayolas y luego en compañía del capitán Juan de Salazar y Espinoza fundó en 1537 el fuerte de Nuestra Señora de la Asunción.
Un curioso y llamativo acontecimiento se vivió en el Paraguay colonial el año 1572. Siendo Felipe de Cáceres gobernador, padeció y fue defenestrado por el obispo de Asunción, fray Fernando de la Torre que, en abierto desafío a su autoridad, lo acusó públicamente de “luterano”. Logró su deposición y posterior envío a Sevilla para ser entregado al Tribunal del Santo Oficio.
En 1842 se sancionó una ley que en su artículo 25 expresa la prohibición de la presencia de sectas religiosas o libertad de cultos en el territorio nacional. A partir de 1870 se “permitió el libre ejercicio de cualquier otra religión que la Católica” en la Constitución Nacional.
Inmigración
A partir de 1870, Paraguay procuró, alentó y fomentó el ingreso de inmigrantes extranjeros para que poblaran y contribuyeran al desarrollo del país.
En 1898 las cámaras del Congreso sancionan leyes para el fomento de la inmigración. La mayoría de los inmigrantes que llegaron fueron comunidades de protestantes agricultores y comerciantes.
Una de las primeras comunidades en llegar fue la de alemanes (luteranos), a partir de 1881. Para 1927 empiezan a llegar menonitas, rusos alemanes y canadienses. Otra comunidad de inmigrantes que sería importante en la predicación del evangelio fueron los coreanos presbiterianos y pentecostales, que llegan al final de la década de 1950 y comienzos del 60.
El inicio del evangelismo se da en la década de 1950 con muchas dificultades, dado que los paraguayos tienen una religiosidad católica muy fuertemente arraigada. Las campañas masivas surgen a partir de 1957. En 1962 estuvieron los predicadores Joe Blined y Billy Graham. Ya en la década del 70 se puede mencionar a Luis Palau y el 80 a Jimmy Swagart y Carlos Anacondia. Las estadísticas dicen que de 6.500.000 habitantes, un 8% de la población es evangélica y, por otro lado, un 88% es católico.