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Además del anestésico bupivacaína, de la marca Buloc y fabricado por el Laboratorio indio Celón (representado en Paraguay por Profarma Salud), otro medicamento, denominado Fentanilo, está siendo investigado por las autoridades sanitarias, en el marco de la muerte de una mujer en el Hospital Central de IPS hace dos semanas y el ingreso de un joven a terapia intensiva, actualmente fuera de peligro. Ambos pacientes recibieron estos medicamentos antes de comenzar a tener reacciones que derivaron en el caso fatal, por un lado, y en un coma profundo por el otro.
Christian Rienzi, representante legal de la firma Profarma Salud, proveedora de bupivacaína al IPS, dijo que el producto cuenta con todas las garantías y además es sometido a un doble control antes de ser distribuido. “No es un producto nuevo, ya tiene experiencia de uso en el mercado. Tiene todos los controles de calidad exigidos por el Ministerio de Salud y el IPS antes de ser distribuido. Nunca tuvo problemas anteriormente”, señaló a ABC Cardinal.
Sobre los casos que motivaron la cuarentena del anestésico de origen indio, reiteró que IPS hace controles de calidad a las dosis antes de meter los productos a su parque sanitario, cuyos resultados son notificados a la cartera sanitaria, que vuelve a practicar controles a la anestesia. “Son productos anestésicos, como todo producto tiene sus usos adversos, sus sobredosis. Es muy difícil de explicar (qué pudo pasar). El producto se usa desde hace más de tres años y nunca tuvimos notificación de un problema”, aseguró.
Afirma que ya se ha distribuido casi 50.000 ampollas solamente en IPS y es la primera vez que sucede esto. También distribuyen para el Ministerio de Salud y en el sector privado, sin que hasta el momento se haya registrado otro caso como los de la previsional. En cuanto al segundo medicamentos investigado, de nombre Fentanilo, las autoridades sanitarias aún no dieron datos de la marca, el laboratorio y de que procedencia es.
Los anestesistas del IPS ya señalaron que ambos fármacos son de dudosa calidad y pidieron a la previsional no priorizar lo barato, dejando de lado la calidad.